HARASTA.- Las fuerzas gubernamentales sirias se han enfrentado a rebeldes armados este jueves en Duma, una localidad situada al norte de Damasco, mientras que un gobernador provincial ha propuesto iniciar negociaciones para acordar un alto el fuego en algunas zonas.
Un oficial del Ejército ha declarado en Harasta, cerca de Duma, que los enfrentamientos en Duma comenzaron esta mañana.
Las fuerzas gubernamentales han estado registrando viviendas intentando encontrar armas y sospechosos contra los que pesan órdenes de arresto. Los periodistas han podido ver algunas de las armas incautadas, como granadas de mano.
El Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, un grupo opositor, ha afirmado que las fuerzas de seguridad han detenido a 200 personas en Duma, uno de los puntos principales de las protestas y la rebelión armada contra el régimen del presidente Bashar al Assad.
Mientras los observadores de la Liga Árabe se dirigían a algunos de los barrios más conflictivos de la capital, el gobernador de la Zona Rural de Damasco, Hussein Majluf, les ha dicho que "a muchos de ellos (en la oposición) los han engañado" y que "acabarán volviendo al buen camino".
"Hemos iniciado un diálogo con ellos, también con algunos grupos armados que controlan posiciones aquí", ha destacado.
El gobernador ha explicado a los observadores --que han viajado a Siria para comprobar si el Gobierno está aplicando el plan de paz de la Liga Árabe-- que las autoridades están "haciendo lo mismo que en Zabadani, así que se producirá la misma situación".
Este mes de enero, el Ejército retiró los vehículos blindados de Zabadani, una localidad controlada por los rebeldes que se encuentra cerca de la frontera con Líbano, después de negociar una tregua.
Los observadores árabes se han detenido a la entrada de Irbin, en la periferia de Damasco, donde una docena de soldados montaban guardia. Frente a ellos había un grupo de unos cien manifestantes opositores que gritaban "¡Allahu akbar!" (Alá es grande).
Los militares han mostrado a los observadores el cadáver de un soldado y de otra persona que, según han dicho, murieron esta mañana. Los miembros de la delegación de observación se marcharon sin haber entrado en Irbin.
Los observadores --que son 55 menos que hace unos días a causa de la retirada de los miembros procedentes de los países del Consejo de Cooperación del Golfo-- han reanudado su labor después de una interrupción de una semana durante la cual la Liga Árabe decidió prolongar su misión un mes más.
"El informe ya se escribió y (la Liga) ya tomó las decisiones correspondientes, así que otro mes ¿para hacer qué? No lo sabemos", ha comentado uno de los observadores.
Varios grupos opositores sirios han acusado a la delegación de observación, que llegó al país el pasado 26 de diciembre, de dar cobertura diplomática a Al Assad mientras continúa la represión de los manifestantes. Más de 5.000 personas han muerto desde marzo, cuando comenzaron las protestas antigubernamentales, según la ONU.
El secretario general de la Liga Árabe, Nabil Elaraby, ha instado a Damasco a poner fin a las operaciones militares contra "civiles indefensos". En un comunicado publicado este jueves, ha expresado su preocupación por "las matanzas y la violencia continuas, que siguen cobrándose la vida de víctimas inocentes".
En los últimos meses, la lucha armada iniciada por opositores y soldados que desertaron del Ejército ha ido eclipsando cada vez más las manifestaciones pacíficas en favor de la democracia. Algunos activistas creen que el despliegue del Ejército y los enfrentamientos en torno a Damasco demuestran que los insurgentes tienen más fuerza.
"El Ejército Libre Sirio controla casi totalmente algunas zonas de la Zona Rural de Damasco y parcialmente Duma y Harasta", ha asegurado a Reuters un activista llamado Hussein desde Harasta.
En Duma, Harasta e Irbin, otros activistas han contado que las fuerzas gubernamentales se han concentrado en estas localidades después de que los rebeldes se retirasen porque no podían librar una guerra sin cuartel con el Ejército. Abu Thaer, un combatiente del Ejército Libre Sirio, ha indicado que "el Ejército de Al Assad tiene vehículos y armas antiaéreas" mientras que ellos solo tienen "fusiles y granadas propulsadas por cohetes".
Elaraby ha informado este jueves de que él y el primer ministro de Qatar, Hamad bin Jassim al Thani, presentarán un plan de paz árabe para Siria en el Consejo de Seguridad de la ONU el próximo lunes.
Rusia había señalado previamente que iba a seguir impulsando su propio borrador de resolución sobre Siria, aunque no descartaba la posibilidad de llegar a un acuerdo. "Por ahora (...), Siria tiene su propio borrador y lo promoverá activamente en el marco del Consejo de Seguridad", ha dicho Alexander Lukashevich, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso.
Francia ha manifestado su inquietud por la situación en Hama, donde las fuerzas sirias han lanzado una gran ofensiva. "Para hacer frente a la represión sangrienta e implacable del régimen sirio, es esencial que la comunidad internacional asuma su responsabilidad y apruebe una resolución en el Consejo de Seguridad que condene la violencia del Gobierno de Damasco contra su pueblo", ha subrayado un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores.
El secretario de Estado adjunto para la Democracia en el Departamento de Estado de Estados Unidos, Michael Posner, ha asegurado en El Cairo que Washington está "deseando" colaborar con la Liga Árabe y que tiene la "esperanza" de que podrán acudir dentro de poco al Consejo de Seguridad "para plantear la cuestión".
