jueves, 15 de mayo de 2014

Los indignados vuelven a Madrid en protesta contra los recortes

MADRID.- Cientos de personas conmemoraron hoy el tercer aniversario del movimiento de los indignados, que en 2011 inundó España de protestas contra los recortes y la política neoliberal.

 Como entonces, se concentraron en la céntrica Puerta del Sol, de Madrid, con demandas de empleo, fin de los recortes sociales y críticas a la llamada Troika, compuesta por el Fondo Monetario Internacional, el Banco Europeo y la Comunidad Europea.

El movimiento de los indignados, que dejó una marca en el panorama político, no solo quiere recordar los tres años de su protagonismo, sino demostrar que las causas siguen vigentes o han empeorado, pese a los mensajes optimistas del gobierno español.

Esa iniciativa dejó como resultado la creación de plataformas reivindicativas al margen de los partidos tradicionales sobre todo los dos grandes, el Partido Popular (PP) y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) que han gobernado los últimos años.

En España a este predominio se identifica como bipartidismo por la similitud de posiciones del derechista PP y el socialdemócrata PSOE, al que la izquierda acusa de haber arriado sus banderas reformistas y plegarse a la política neoliberal.

Desde hoy y hasta el 25 de mayo, fecha de la votación en España al Parlamento Europeo, se prevé la continuidad de manifestaciones, con particular énfasis el sábado 17 de mayo, con una manifestación desde la Plaza de Cibeles hasta Sol.

Con el lema "ni fronteras, ni deuda, ni miedo" el colectivo Acampada Sol, uno de los que dio origen a las acciones de mayo de 2011, convocó a conmemorar en las calles el tercer aniversario del denominado movimiento 15M.

Los organizadores esperan llenar el 17 de mayo la Puerta del Sol, plaza que acogió las mayores demostraciones en protesta contra los programas de austeridad y privatizaciones.

"En tiempos de crisis, se nos dice que no hay alternativa a la austeridad. Pero la gente pagamos, sufrimos y morimos, mientras los bancos han sido rescatados con centenares de millones de euros", expresó la convocatoria a las nuevas demostraciones

La conmemoracion incluye la realización de las Jornadas Abiertas 15M para exponer alternativas a la situación en el Campo de la Cebada, un espacio abierto donde hubo un estadio en el Distrito Central de Madrid.

Las movilizaciones concluirán el 25 de mayo, cuando se proyecta que las llamadas asambleas populares organizadas en barrios de Madrid vuelvan a reunirse en el centro de la capital para mostrar la permanencia de las causas del movimiento de los indignados.

Mantener el Parlamento Europeo en tres sedes cuesta 119,9 millones de euros al año

BRUSELAS.- La continuidad de las tres sedes de trabajo que tiene en la actualidad el Parlamento Europeo (Estrasburgo, Bruselas y Luxemburgo) supone un coste adicional de un total de 119,9 millones de euros, según estimaciones de la propia cámara legislativa comunitaria.

En virtud de un acuerdo alcanzado en 1992 por los países que entonces conformaban la Unión Europea, la Eurocámara tiene a Estrasburgo como sede para las sesiones plenarias y a Bruselas como sede de las comisiones y los grupos parlamentarios, mientras que Luxemburgo acoge la Secretaría General del organismo (su personal).
El uso de esta triple sede para el Parlamento Europeo comporta unos gastos adicionales de 119,9 millones de euros cada año aunque si todas las actividades de Estrasburgo se trasladaran a Bruselas, se podrían ahorrar 103 millones de euros, según un reciente estudio elaborado por la Eurocámara.
Sin embargo, el paso a una única sede del Parlamento comunitario en Bruselas conllevaría también un gasto, toda vez que se tendrían que adquirir oficinas para alojar al personal que ahora trabaja en Luxemburgo (2.482 personas).
La Eurocámara calcula que el coste de estas oficinas sería de unos 14 millones de euros al año, además de otro pago único de 58,6 millones de euros por el traslado de las actividades parlamentarias de Luxemburgo a Bruselas.
En conclusión, el Parlamento Europeo estima que el cambio a una única sede en Bruselas supondría un ahorro de 88,9 millones de euros al año, lo que supone el 4,96 por ciento de su presupuesto para 2014. Además, las emisiones de CO2 derivadas de los traslados desde y hacia las tres sedes actuales de la Eurocámara suponen al menos 11.000 toneladas.
La Eurocámara ha aprobado en esta legislatura una resolución por una amplia mayoría para exigir que Bruselas se convierta en su sede única. El texto, ratificado en noviembre de 2013 con el voto a favor de 483 eurodiputados, el rechazo de 141 y 34 abstenciones, subraya que la continua "migración mensual" de parlamentarios entre Bruselas y Estrasburgo "se ha convertido en una cuestión simbólica negativa para la mayoría de los ciudadanos de la UE" y es "perjudicial" para la reputación comunitaria, "especialmente en un momento en que la crisis financiera ha llevado a recortes graves y dolorosos del gasto en los Estados miembros".
La resolución eleva los costes anuales adicionales estimados que provoca la triple sede de la Eurocámara a entre 156 millones de euros y 204 millones, lo que supone el 10 por ciento del presupuesto anual de la cámara comunitario. También aumenta la estimación de emisiones de CO2 relacionadas con los desplazamientos a los tres lugares de trabajo a entre las 11.000 y las 19.000 toneladas.
La petición del Parlamento Europeo no se ha materializado por la oposición que ha encontrado en el Consejo Europeo. Francia rechaza el cambio a Bruselas porque no quiere renunciar a Estrasburgo y el paso a una sola sede tiene que ser ratificados por los 28 países comunitarios.
La continuidad de las tres sedes de trabajo que tiene en la actualidad el Parlamento Europeo (Estrasburgo, Bruselas y Luxemburgo) supone un coste adicional de un total de 119,9 millones de euros, según estimaciones de la propia cámara legislativa comunitaria consultadas por Europa Press.
En virtud de un acuerdo alcanzado en 1992 por los países que entonces conformaban la Unión Europea, la Eurocámara tiene a Estrasburgo como sede para las sesiones plenarias y a Bruselas como sede de las comisiones y los grupos parlamentarios, mientras que Luxemburgo acoge la Secretaría General del organismo (su personal).
El uso de esta triple sede para el Parlamento Europeo comporta unos gastos adicionales de 119,9 millones de euros cada año aunque si todas las actividades de Estrasburgo se trasladaran a Bruselas, se podrían ahorrar 103 millones de euros. Sin embargo, el paso a una única sede del Parlamento comunitario en Bruselas conllevaría también un gasto, toda vez que se tendrían que adquirir oficinas para alojar al personal que ahora trabaja en Luxemburgo (2.482 personas).
La Eurocámara calcula que el coste de estas oficinas sería de unos 14 millones de euros al año, además de otro pago único de 58,6 millones de euros por el traslado de las actividades parlamentarias de Luxemburgo a Bruselas.

Ahorro final con sede única

En conclusión, el Parlamento Europeo estima que el cambio a una única sede en Bruselas supondría un ahorro de 88,9 millones de euros al año, lo que supone el 4,96% de su presupuesto para 2014. Además, las emisiones de CO2 derivadas de los traslados desde y hacia las tres sedes actuales de la Eurocámara suponen al menos 11.000 toneladas.
La Eurocámara ha aprobado en esta legislatura una resolución por una amplia mayoría para exigir que Bruselas se convierta en su sede única. El texto, ratificado en noviembre de 2013 con el voto a favor de 483 eurodiputados, el rechazo de 141 y 34 abstenciones, subraya que la continua "migración mensual" de parlamentarios entre Bruselas y Estrasburgo "se ha convertido en una cuestión simbólica negativa para la mayoría de los ciudadanos de la UE" y es "perjudicial" para la reputación comunitaria, "especialmente en un momento en que la crisis financiera ha llevado a recortes graves y dolorosos del gasto en los Estados miembros".
La resolución eleva los costes anuales adicionales estimados que provoca la triple sede de la Eurocámara a entre 156 millones de euros y 204 millones, lo que supone el 10% del presupuesto anual de la cámara comunitario. También aumenta la estimación de emisiones de CO2 relacionadas con los desplazamientos a los tres lugares de trabajo a entre las 11.000 y las 19.000 toneladas.
La petición del Parlamento Europeo no se ha materializado por la oposición que ha encontrado en el Consejo Europeo. Francia rechaza el cambio a Bruselas porque no quiere renunciar a Estrasburgo y el paso a una sola sede tiene que ser ratificados por los 28 países comunitarios.


Leer más:  Mantener el Parlamento Europeo en tres sedes cuesta 119,9 millones de euros al año - EcoDiario.es  http://ecodiario.eleconomista.es/interstitial/volver/aciertoabril/politica/noticias/5780774/05/14/Mantener-el-Parlamento-Europeo-en-tres-sedes-cuesta-1199-millones-de-euros-al-ano.html#Kku8N2dWxZDAVCBi


La continuidad de las tres sedes de trabajo que tiene en la actualidad el Parlamento Europeo (Estrasburgo, Bruselas y Luxemburgo) supone un coste adicional de un total de 119,9 millones de euros, según estimaciones de la propia cámara legislativa comunitaria consultadas por Europa Press.
En virtud de un acuerdo alcanzado en 1992 por los países que entonces conformaban la Unión Europea, la Eurocámara tiene a Estrasburgo como sede para las sesiones plenarias y a Bruselas como sede de las comisiones y los grupos parlamentarios, mientras que Luxemburgo acoge la Secretaría General del organismo (su personal).
El uso de esta triple sede para el Parlamento Europeo comporta unos gastos adicionales de 119,9 millones de euros cada año aunque si todas las actividades de Estrasburgo se trasladaran a Bruselas, se podrían ahorrar 103 millones de euros. Sin embargo, el paso a una única sede del Parlamento comunitario en Bruselas conllevaría también un gasto, toda vez que se tendrían que adquirir oficinas para alojar al personal que ahora trabaja en Luxemburgo (2.482 personas).
La Eurocámara calcula que el coste de estas oficinas sería de unos 14 millones de euros al año, además de otro pago único de 58,6 millones de euros por el traslado de las actividades parlamentarias de Luxemburgo a Bruselas.

Ahorro final con sede única

En conclusión, el Parlamento Europeo estima que el cambio a una única sede en Bruselas supondría un ahorro de 88,9 millones de euros al año, lo que supone el 4,96% de su presupuesto para 2014. Además, las emisiones de CO2 derivadas de los traslados desde y hacia las tres sedes actuales de la Eurocámara suponen al menos 11.000 toneladas.
La Eurocámara ha aprobado en esta legislatura una resolución por una amplia mayoría para exigir que Bruselas se convierta en su sede única. El texto, ratificado en noviembre de 2013 con el voto a favor de 483 eurodiputados, el rechazo de 141 y 34 abstenciones, subraya que la continua "migración mensual" de parlamentarios entre Bruselas y Estrasburgo "se ha convertido en una cuestión simbólica negativa para la mayoría de los ciudadanos de la UE" y es "perjudicial" para la reputación comunitaria, "especialmente en un momento en que la crisis financiera ha llevado a recortes graves y dolorosos del gasto en los Estados miembros".
La resolución eleva los costes anuales adicionales estimados que provoca la triple sede de la Eurocámara a entre 156 millones de euros y 204 millones, lo que supone el 10% del presupuesto anual de la cámara comunitario. También aumenta la estimación de emisiones de CO2 relacionadas con los desplazamientos a los tres lugares de trabajo a entre las 11.000 y las 19.000 toneladas.
La petición del Parlamento Europeo no se ha materializado por la oposición que ha encontrado en el Consejo Europeo. Francia rechaza el cambio a Bruselas porque no quiere renunciar a Estrasburgo y el paso a una sola sede tiene que ser ratificados por los 28 países comunitarios.


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La continuidad de las tres sedes de trabajo que tiene en la actualidad el Parlamento Europeo (Estrasburgo, Bruselas y Luxemburgo) supone un coste adicional de un total de 119,9 millones de euros, según estimaciones de la propia cámara legislativa comunitaria consultadas por Europa Press.
En virtud de un acuerdo alcanzado en 1992 por los países que entonces conformaban la Unión Europea, la Eurocámara tiene a Estrasburgo como sede para las sesiones plenarias y a Bruselas como sede de las comisiones y los grupos parlamentarios, mientras que Luxemburgo acoge la Secretaría General del organismo (su personal).
El uso de esta triple sede para el Parlamento Europeo comporta unos gastos adicionales de 119,9 millones de euros cada año aunque si todas las actividades de Estrasburgo se trasladaran a Bruselas, se podrían ahorrar 103 millones de euros. Sin embargo, el paso a una única sede del Parlamento comunitario en Bruselas conllevaría también un gasto, toda vez que se tendrían que adquirir oficinas para alojar al personal que ahora trabaja en Luxemburgo (2.482 personas).
La Eurocámara calcula que el coste de estas oficinas sería de unos 14 millones de euros al año, además de otro pago único de 58,6 millones de euros por el traslado de las actividades parlamentarias de Luxemburgo a Bruselas.

Ahorro final con sede única

En conclusión, el Parlamento Europeo estima que el cambio a una única sede en Bruselas supondría un ahorro de 88,9 millones de euros al año, lo que supone el 4,96% de su presupuesto para 2014. Además, las emisiones de CO2 derivadas de los traslados desde y hacia las tres sedes actuales de la Eurocámara suponen al menos 11.000 toneladas.
La Eurocámara ha aprobado en esta legislatura una resolución por una amplia mayoría para exigir que Bruselas se convierta en su sede única. El texto, ratificado en noviembre de 2013 con el voto a favor de 483 eurodiputados, el rechazo de 141 y 34 abstenciones, subraya que la continua "migración mensual" de parlamentarios entre Bruselas y Estrasburgo "se ha convertido en una cuestión simbólica negativa para la mayoría de los ciudadanos de la UE" y es "perjudicial" para la reputación comunitaria, "especialmente en un momento en que la crisis financiera ha llevado a recortes graves y dolorosos del gasto en los Estados miembros".
La resolución eleva los costes anuales adicionales estimados que provoca la triple sede de la Eurocámara a entre 156 millones de euros y 204 millones, lo que supone el 10% del presupuesto anual de la cámara comunitario. También aumenta la estimación de emisiones de CO2 relacionadas con los desplazamientos a los tres lugares de trabajo a entre las 11.000 y las 19.000 toneladas.
La petición del Parlamento Europeo no se ha materializado por la oposición que ha encontrado en el Consejo Europeo. Francia rechaza el cambio a Bruselas porque no quiere renunciar a Estrasburgo y el paso a una sola sede tiene que ser ratificados por los 28 países comunitarios.


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