martes, 11 de diciembre de 2012

El ejército egipcio pide unidad mientras la crisis se extiende

EL CAIRO.- El Ejército de Egipto pidió el martes que se celebren conversaciones para alcanzar la unidad nacional y terminar con la creciente crisis política en el país, poco después de que se retrasase un préstamo vital de 4.800 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional al país.

La reunión prevista para la tarde del miércoles, fue convocada en respuesta a la creciente serie de protestas que se desataron desde que el presidente Mohamed Mursi se autoadjudicó poderes especiales a finales de noviembre para aprobar, en un referéndum que se celebrará el sábado, una nueva Constitución redactada por sus aliados islamistas.

"No hablaremos de política ni del referéndum. Mañana no sentaremos juntos como egipcios", dijo el jefe de las Fuerzas Armadas y ministro de Defensa Abdel Fattah al-Sisi en una reunión entre ejército y responsables policiales.

Un aliado dijo que Mursi respaldó la petición. Los Hermanos Musulmanes informaron que asistirán a la reunión, mientras que la principal coalición opositora dijo que decidiría el miércoles si acude al encuentro.

Más temprano el martes, el ministro de Finanzas dijo que el préstamo de 4.800 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional (FMI) a Egipto será retrasado hasta el próximo mes, lo que intensifica la crisis política en la nación más poblada del mundo árabe.

El ministro Mumtaz al-Said dijo que la demora en el acuerdo del préstamo busca generar tiempo para explicar al pueblo un paquete de medidas de austeridad económica duramente criticado.

El anuncio se produjo después de que Mursi diera marcha atrás el lunes a una serie de aumentos impositivos, considerados vitales para que el préstamo sea concedido, solo horas después de ser anunciados.

Grupos de la oposición habían criticado ferozmente el paquete impositivo, que incluía gravámenes a bebidas alcohólicas, cigarrillos y una serie de bienes y servicios.

"Por supuesto, el retraso tendrá cierto impacto económico, pero estamos debatiendo las medidas necesarias (para resolverlo) en el período por venir", dijo el ministro, que añadió: "Soy optimista (...) Todo estará bien, si Dios quiere".

El primer ministro Hisham Kandil añadió: "Los desafíos son económicos, no políticos, y deben ser resueltos al margen de la política". La demora fue confirmada por el FMI.

La entidad informó en Washington que Egipto había pedido que el préstamo se extendiera "a la luz de los acontecimientos en el campo".

En las calles de la capital egipcia, las tensiones se incrementaron después de que nueve personas fueran heridas cuando hombres armados atacaron a manifestantes que acampaban en la Plaza Tahrir, según testigos y medios locales.

La oposición convocó a una manifestación con la que espera obligar a Mursi a posponer un referendo sobre la Constitución. Miles de personas se reunieron frente al palacio presidencial, cuyas paredes están escritas con graffitis contra Mursi.

Los partidarios del líder islámico, que quieren que la votación se realice el sábado como está planeado, también se reunieron en la capital, fijando el escenario para nuevas confrontaciones callejeras en medio de la crisis política que ha dividido a la nación de 83 millones de habitantes.

La agitación social tras la caída de Hosni Mubarak el año pasado está causando preocupación en Occidente, en particular en Estados Unidos, que ha dado a El Cairo miles de millones de dólares en ayuda militar y otros tipos de asistencia desde que Egipto firmó la paz con Israel en 1979.

La portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, enfatizó su "profunda preocupación" por la situación en Egipto y repitió los llamamientos a los manifestantes para que protesten pacíficamente y a las fuerzas de seguridad para que actúen con moderación.

"Las partes implicadas en Egipto están planteando preguntas reales y legítimas, tanto sobre el contenido como sobre el proceso para pasar a un referéndum constitucional este fin de semana", dijo Nuland en una rueda de prensa.

La portavoz declinó comentar si Washington cree que el referéndum en cuestión debe ser pospuesto.

Los disturbios generaron también una fuerte presión sobre la economía, causando una merma de las reservas de moneda extranjera a 15.000 millones de dólares, menos de la mitad del nivel en que estaban antes de la revuelta hace dos años.

Patrullas de la policía rodeaban la Plaza Tahrir en el centro de El Cairo por primera vez desde el 23 de noviembre, poco después de que Mursi emitiera un decreto en el que se adjudicaba poderes temporales que dejaba sus decisiones por encima de la justicia y provocara fuertes protestas en Egipto.

Los atacantes en la Plaza Tahrir, algunos enmascarados, también lanzaron cócteles molotov que causaron un pequeño incendio, dijeron testigos.

"Hombres enmascarados llegaron de pronto y atacaron a los manifestantes en Tahrir. El ataque buscó disuadirnos y evitar que nos manifestemos hoy (martes). Nos oponemos a estas tácticas de terror y hoy realizaremos la protesta más grande posible", dijo John Gerges, un egipcio cristiano que dijo ser socialista.

La última ola de descontento dejó siete muertos en choques entre partidarios de los Hermanos Musulmanes y opositores.

La Guardia Republicana que protege el palacio ha tenido que usar la fuerza para alejar a los manifestantes de los muros del recinto, ahora rodeado por tanques, alambres de púas y barricadas de cemento.

El Ejército ha pedido a los bandos que resuelvan sus diferencias a través del diálogo. Para el período en que se realizará el referéndum, los militares han recibido más poderes por parte de Mursi que les permitirán arrestar a civiles.

Los líderes de la oposición quieren que el referéndum sea pospuesto y esperan poder contar con una cantidad suficiente de manifestantes en las calles para cambiar la decisión de Mursi.

Los musulmanes, que dominaron en la Asamblea que redactó la Constitución que se someterá al voto popular, han instado a sus seguidores a salir "en millones" en una muestra de apoyo al presidente y a la consulta que se sienten seguros de ganar.

La oposición considera que la Constitución en cuestión no tiene en cuenta la diversidad de la población egipcia, de la que una décima parte es cristiana.

Enfrentamientos graves

Miles de egipcios han vuelto a salir a las calles de El Cairo y otras ciudades del país para sumarse a manifestaciones a favor y en contra del presidente, Mohamed Mursi, al que sus detractores han acusado de acumular poder y promover una constitución que solo representa a los islamistas.
   Al contrario de lo ocurrido en otras ocasiones, no se han registrado choques violentos de especial gravedad, habida cuenta de que las concentraciones de El Cairo se han realizado con varios kilómetros de por medio.
   Como viene siendo habitual, los alrededores del palacio presidencial han sido el punto álgido de las concentraciones de la oposición, mientras que los islamistas afines al presidente se han reunido frente a una mezquita del este de la capital.
   El Frente de Salvación Nacional, que aglutina a los principales movimientos de la oposición, había convocado para este martes una nueva jornada de movilizaciones contra el proyecto constitucional que será sometido a referéndum el próximo sábado. Decenas de miles de personas han secundado la llamada y han participado en varias marchas y en una concentración frente al palacio presidencial, según informa el periódico estatal 'Al Ahram'.
   La residencia oficial de Mursi presentó durante todo el día un amplio despliegue de seguridad, resguardada por un muro de cemento y por decenas de militares que contaban incluso con el apoyo de tanques. Sin embargo, esta protección no ha impedido que los manifestantes desafiasen en algunos momentos a las fuerzas del Gobierno e intentasen romper el perímetro de seguridad.
   Como medida de precaución, unas 15 ambulancias han permanecido junto al palacio, en cuyas inmediaciones perdieron la vida el pasado miércoles nueve personas. Los choques de ese día entre islamistas y laicos se saldaron también con cientos de heridos.
   "Mataron a nuestros hermanos en el palacio presidencial" y "Vete, vete como hizo Mubarak" fueron algunas de las consignas escuchadas en las movilizaciones opositoras, que también han tenido eco en las ciudades de Alejandría y en Assiut.

El Gobierno francés presenta un programa para enfrentar la pobreza

PARÍS.- Aumentar las ayudas a familias sin recursos y ofrecer algunas garantías a jóvenes desempleados figuran en el plan presentado hoy por el gobierno francés para enfrentar la pobreza, que afecta a cerca de nueve millones de personas.

 El primer ministro Jean-Marc Ayrault anunció que en los próximos cinco años se elevará un 10 por ciento el Ingreso de Solidaridad Activa (RSA, por sus siglas en francés) destinado a respaldar a personas desvalidas o con salarios muy bajos.

El gobierno también ofrecerá anualmente apoyo a unos 100.000 jóvenes de entre 18 y 25 años que no tienen trabajo, ni formación.

Esta medida, que comenzará a aplicarse en septiembre de 2013, será acompañada de propuestas de educación y empleo.

Un informe dado a conocer aquí señala que 22,5 por ciento de los jóvenes no alcanzan a cubrir sus necesidades básicas, cifra que representa un incremento de cinco puntos con respecto a 2004.

El programa para combatir la pobreza contempla también elevar los subsidios a las familias monoparentales y a los hogares donde existan tres niños o más.

Además, serán creadas 150.000 viviendas sociales y ocho mil nuevas plazas destinadas a acoger a personas sin techo y a demandantes de asilo.

Las medidas fueron anunciadas en el segundo y último día de la conferencia nacional contra la pobreza y la exclusión social que reunió a funcionarios, representantes sindicales y miembros de organizaciones de la sociedad civil.

Según la ministra de Asuntos Sociales y de la Salud, Marisol Touraine, hay 8,5 millones de personas en la precariedad, uno de cada cinco habitantes renunció a cuidados médicos por cuestiones financieras, 3,5 millones tienen problemas de vivienda y 800.000 dependen de una ayuda alimentaria.

Trabajadores griegos avivan protestas contra medidas gubernamentales

ATENAS.- Trabajadores y funcionarios públicos en Grecia intensificaron hoy sus protestas contra las políticas de austeridad del gobierno y las medidas exigidas por los acreedores internacionales.

 Campesinos, maestros, empleados de ayuntamientos y administraciones locales, jueces, fiscales y farmacéuticos coincidieron hoy en las calles del país para rechazar la nueva alza de impuestos, los recortes en los sueldos, los despidos en el sector público o el pago de las deudas contraídas por el estado.

Así, los agricultores tomaron diversas ciudades montados en sus tractores para protestar contra el aumento indiscriminado de impuestos y suministros, mientras se reducen las pensiones, el nivel de los servicios de salud y los subsidios.

La Federación de Asociaciones Agrarias calificó como "brutales" las nuevas medidas impuestas por los prestamistas y aseguró que la política agraria europea de los próximos años acabará con los pequeños productores, y frente a "este ataque la única respuesta es la lucha unida y militante".

Los sindicatos de las administraciones locales continuaron un día más con las concentraciones y ocupaciones de dependencias públicas contra los planes gubernamentales de despedir a dos mil trabajadores antes de fin de año.

Durante el jueves y el viernes dirigentes sindicales tienen previsto realizar encuentros por todo el país para informar a los empleados públicos sobre las últimas novedades legislativas y los planes del gobierno.

Los paros comenzarán el fin de semana, pues no habrá servicios públicos tales como recogida de basura y otros, mientras que el lunes iniciará una huelga de 48 horas el personal de la administración local, que continuará el miércoles con la convocatoria de 24 horas hecha por Adedy para todos los empleados públicos.

Para el mismo día están también llamados los trabajadores del sector privado ya que el mayor sindicato del país, la Confederación General de Trabajadores Griegos GSEE, convocó una huelga de tres horas y una marcha de protesta por el centro de la capital.

Por su parte jueces y fiscales decidieron ayer en asamblea continuar con los paros parciales que iniciaron en septiembre hasta el próximo 19 de enero, y que están generando un colapso sin precedentes en los tribunales con miles de casos paralizados.

Por último, las farmacias de la capital cerraron sus puertas en protesta por los más de 500 millones de euros que les adeuda desde hace meses el organismo estatal de salud y contra los planes del ejecutivo de liberalizar el sector.

Putin dice que la mayoría de los rusos no quieren revolución

MOSCÚ.- El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha afirmado que la mayoría de los rusos no quieren la revolución, sino cambios a mejor en el periodo más corto de tiempo posible, agregando que su opinión en este sentido esta basada en experiencia de primera mano.

   El mandatario ruso ha indicado que, por ello, no cree que las protestas que tuvieron lugar entre finales de 2011 y principios de 2012 en el país sean algo inusual. "Cualquier país ve un aumento de la actividad pública durante las campañas electorales, incluyendo las actividades de protesta", ha argumentado. En este sentido, ha recordado que las manifestaciones llevaron al clímax durante los comicios parlamentarios.
   Putin ha añadido además que, incluso sus críticos más acérrimos han de admitir que dichos comicios fueron ganados por él en la primera ronda, y que las discusiones giraban en torno al porcentaje de votos obtenidos, no al resultado final, según ha informado la cadena de televisión rusa RT.
   Asimismo, ha descartado que la disminución en el número de protestas está conectada con que "se haya apretado las tuercas" a la población, ya que, según él, todos los ciudadanos rusos siguen teniendo el derecho y la oportunidad de expresar sus opiniones a través de todos los medios legales.
   Por último, Putin ha señalado que, por lo que él cree, los líderes de las protestas que recorrieron el país muestran una actitud de "ser gente inteligente", motivo por el que ha expresado su deseo de que "trabajen en el marco de las nuevas oportunidades abiertas por la adopción de nuevas leyes".

Disminuye la proporción de protestantes en Irlanda del Norte, según el último censo

BELFAST.- La proporción de protestantes en Irlanda del Norte ha disminuido por primera vez en los últimos diez años frente al aumento de católicos, según el censo de 2010 hecho público este martes.

   De acuerdo con el censo, la proporción de protestantes ha pasado del 53 al 48 por ciento, mientras que la de católicos ha aumentado del 44 al 45 por ciento. Las cifras indican que hay 136.497 católicos en Irlanda del Norte frente a 118.856 protestantes.
   A su vez, los demógrafos han predicho que los católicos podrían convertirse en mayoría de votantes en la próxima generación. El incremento del número de católicos podría alterar el frágil equilibrio político en la provincia.
   Los nacionalistas católicos comparten el control de la provincia británica irlanda del Norte con los unionistas protestantes bajo un acuerdo de paz firmado en 1998 que supuso el fin de tres décadas de violencia sectario que dejó cerca de 3.600 muertos.
   Los partidos unionistas perdieron el control del ayuntamiento de Belfast el año pasado permitiendo así que este mes los partidos nacionalistas consiguiesen aprobar una moción para retirar la bandera británica del edificio por primera vez en un siglo.
   En los últimos días, al menos 28 policías han resultado heridos por el aumento de la violencia en las calles de Irlanda. Estos altercados se han debido al sentimiento nacionalista que tienen, principalmente, los católicos que quieren que Irlanda del Norte forme parte de Irlanda.

Amnistía Internacional recuerda que muchos millones de personas viven "presos de la pobreza"

MADRID.- Los efectos de la crisis económica han hecho a Amnistía Internacional reorientar parte de su trabajo en pro de los derechos humanos hacia la defensa de los derechos económicos, sociales y culturales de las personas, para recordar al mundo que "hay muchísimos millones de personas que viven presos de la pobreza" y reclamar el cumplimiento de derechos fundamentales como el de la vivienda. 

   En el día en que se cumplió el 64º aniversario de la Declaración de Derechos Humanos, Amnistía Internacional ha denunciado que la Constitución española "no da la misma categoría" a los derechos económicos, sociales y culturales, especialmente el de la vivienda, que a otros derechos civiles y políticos.
   "En España está bien defendido el derecho a la escuela, no tanto el de la salud y mucho menos el de la vivienda", ha afirmado el responsable de Comunicación de Amnistía Internacional en Cantabria, Fernando Gutiérrez, con motivo de la mesa redonda sobre música y derechos humanos que se celebró este lunes en la Fundación Comillas, en el marco de la Semana de Autor de la SGAE.
   El portavoz de AI ha criticado los desahucios forzosos que se realizan incumpliendo el ordenamiento jurídico internacional, que obliga a garantizar una alternativa de vivienda digna a las personas desalojadas, y ha señalado que en España, "por desgracia, tiene preferencia la ley bancaria" sobre los derechos económicos y sociales, "quizás por un defecto que tiene nuestra Constitución, que de alguna manera no da la misma categoría" a estos derechos que a otros como los políticos o civiles.
   Otro tema de ámbito nacional que preocupa a Amnistía Internacional es la "exclusión sanitaria" a inmigrantes en situación irregular, un asunto que considera "preocupante y peligroso", y que está siguiendo "de cerca" ante la posibilidad de que pueda "endurecerse".
   La organización también ha denunciado los "abusos" de la policía antidisturbios y el "abuso de la capacidad de indulto" del Consejo de Ministros en el caso de los mossos d'esquadra condenados por torturas.
   Este año, Amnistía Internacional dedica el Día Internacional de los Derechos Humanos a la protección y defensa de los defensores de los derechos humanos, "personas sometidas a abusos, amenazas y persecución en lugares de conflicto, que en muchas ocasiones pagan con la vida su trabajo" y que ejercen como interlocutores y correa de transmisión en "muchísimos países" en los que AI tiene "vetada" su implantación.
   "Sin ellos no seríamos nada", afirmó el portavoz de Amnistía Internacional en Cantabria, quien subrayó que en los 64 años transcurridos desde la Declaración de los Derechos Humanos, "hay que reconocer que hemos mejorado en muchos aspectos, pero queda muchísimo por hacer".
   La situación de los derechos humanos en el mundo, añadió, es "variopinta", y el día a día "un poco duro", pero "los que trabajamos en esto tendemos a ser optimistas, porque si fuéramos pesimistas tiraríamos la toalla".
   Fernando Gutiérrez participó ayer lunes en la Fundación Comillas en una mesa redonda moderada por el periodista musical José Miguel López (Radio 3) en la que también tomaron parte los compositores José Ignacio Lapido y Vicky Gastelo, y que formaba parte de las actividades organizadas por la SGAE con motivo del Día de los Derechos Humanos en el marco de la Semana de Autor de la SGAE.