viernes, 14 de noviembre de 2014

El partido oficialista de Venezuela abre una línea telefónica para denunciar "infiltrados"

CARACAS.- El oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) abrió una línea telefónica para que sus militantes denuncien a los "infiltrados" dentro de la organización, en medio de las crecientes críticas internas al gobierno de Nicolás Maduro.

El vicepresidente de organización y asuntos electorales del PSUV, Francisco Ameliach, puso a la orden de los partidarios un número de celular y un correo electrónico donde recolectarán las denuncias escritas.
"El militante que esté fomentando la desunión debe ser denunciado a través de: denunciainfiltradospsuv@gmail.com, y vía sms (mensaje de texto) al 04169425792", escribió el también gobernador del estado central Carabobo, en su cuenta de Twitter.
Otros altos mandos del partido de gobierno, como el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, también han azuzado a los "compatriotas cooperantes" a denunciar activamente a los compañeros del partido o seguidores de la oposición que consideren estén creando conflicto.
"El enemigo que más nos hace daño es el enemigo interno. Es aquel que dice que es chavista y no es chavista", agregó Ameliach en su programa radial "Hablando de Poder".
El gobernador no precisó cómo serán procesados o castigados quienes sean denunciados.
Encuestas recientes muestran que la popularidad de Maduro, heredero político del fallecido Hugo Chávez, se ha deteriorado rápidamente en sus casi dos años de mandato, a causa de una crisis económica que parece estar empeorando.
Sólo 30 por ciento de los venezolanos aprobó su mandato en septiembre, desde el 55 por ciento que lo apoyaba cuando ganó la presidencia en abril de 2013, según la firma Datanálisis.

Elecciones anticipadas, sondeos alarmados y dimisiones obligadas / Ramón Cotarelo *

Hay muchas definiciones de la democracia, pero una es universal; decir democracia es decir elecciones. Cierto, no siempre que hay elecciones hay democracia; pero siempre que hay democracia, hay elecciones. Es más, las democracias miden sus tiempos normalmente por convocatorias electorales públicas, fijas, periódicas. Y cuando hay situaciones anormales, se trata de salir de ellas mediante elecciones extraordinaris o anticipadas. 

Es eso o resignarse a que lo anormal sea lo normal, cosa desatinada. Llega un momento en que los costes de vivir en una normalidad anormal, repleta de sobresaltos y crisis son a todas luces superiores a los de una convocatoria anticipada de comicios. El adelanto electoral se convierte entonces en una necesidad.  Y da la impresión de que, por diversos motivos, en España hay una corriente de opinión cada vez más favorable a elecciones anticipadas.

En los últimos días se han publicado tres sondeos sobre intención de voto. Es prueba de la inquietud mencionada. Quienes quieren o temen elecciones anticipadas desean conocer los datos. Los tres, el de DYM para El confidencial, el del CIS y el de la Fundación Sistema dan resultados muy distintos. 

Los de los dos primeros son más parecidos entre sí aunque la proporción se invierte; los del tercero son muy diferentes. Para DYM, la intención de voto es 1º PP (26,9%), 2º Podemos (26,3%) y 3º PSOE (19,5%). Para el CIS es 1º PP (27,5%), 2º PSOE (23,9%) y 3º Podemos (22,5%). En ambos casos, IU gatea por el fondo con cantidades de un dígito. 

El sondeo de Sistema parece de otro planeta: 1º PSOE (31 a 34%), 2º Podemos (21 a 24%), 3º PP (20 a 22%). Pero la Fundación Sistema es del PSOE, se dice, lo cual resta crédito a su sondeo. Eso no es justo. La ficha técnica es correcta, la Fundación tiene prestigio y un historial de aciertos/errores en todo similar a las empresas más acreditadas que, además, también tienen inclinaciones políticas. Esa discrepancia está lejos de ser absurda. Al contrario, es verosímil y apunta a una hipótesis de gobierno de unidad de la izquierda. Habrá quien se malicie que Sistema hace públicos los resultados con la aviesa intención de convertir en probabilidad la hipótesis. Es posible, pero los otros resultados también alimentan otro tipo de cábalas y las cábalas son libres.

Crece la opinión favorable a varias elecciones anticipadas. El último territorio en que se abre camino es Andalucía, en donde la ìmputación de dos expresidentes crea una situación muy delicada. Susana Díaz se ve en el dilema de mantener el espíritu de partido y la solidaridad con sus compañeros o aplicar su reiterado propósito de distanciarse de la corrupción. De momento cree resolverlo reafirmando su fe en la integridad de sus dos predecesores y aplicando la presunción de inocencia. Pero no está claro que sea suficiente para evitarle problemas políticos y una presión creciente en favor de elecciones anticipadas, cuenta habida de que ella no llegó al cargo por los votos del electorado sino por los de los militantes en sucesión de Griñán.

En Cataluña las elecciones anticipadas son una reclamación viva de muy amplios sectores políticos y sociales y el mismo partido del gobierno sopesa su posibilidad. Tras la enésima ruptura entre Mas y Junqueras, que son como el yin y el yang de la independencia, el PSC se ha apresurado a ofrecer a Mas un pacto de estabilidad para el resto de la legislatura. Podía haber esperado un poco para no evidenciar una oficiosidad palmariamente unionista que puede resultar incómoda a CiU. Los republicanos volverán a la carga, acompañados de las organizaciones cívicas y, en el fondo, Mas solo puede disolver y convocar elecciones anticipadas pues la llamada estabilidad de legislatura significa poner en hibernación el proceso soberanista sin ningún resultado tangible. Rajoy ya ha dicho tajantemente que no hay negociación y mucho menos para un referéndum. La hibernación así será imposible a causa de la fuerte movilización interna en Cataluña y externa, en el ámbito internacional, que el soberanismo ha cuidado especialmente.

El único modo político, o sea, civilizado de cortar el paso a esas elecciones anticipadas catalanas que traen consigo la amenaza de una legitimación redoblada de la exigencia autodeterminista, es convocar otras también anticipadas en España. Vistas tanto la obstinada incompetencia de Rajoy en la cuestión catalana y su fracaso en la solución de la crisis, el año de mandato restante va a ser una agonía sin límite. Además, la corrupción es tan agobiante que lo único sensato es convocar elecciones y transferir la decisión política a la gente, antes de que los inexorables procesos judiciales terminen de hacer trizas el sistema político. Los procesos judiciales sin duda seguirán después de las elecciones, pero ya no se darán entre autoridades muchas de las cuales son parte interesada en ellos como acusadas. Y los políticos electos podrán dedicarse a gobernar, no a defenderse de las acusaciones y sus consecuencias judiciales.

Con elecciones anticipadas también podría resolverse ese nudo gordiano de la irresponsabilidad de los dirigentes implicados en escándalos que jamás dimiten. Es absurdo, es ridículo, que aún no haya dimitido Monago, corrupto azote de corruptos; o la deslenguada Aguirre; o el melancólico Fernández Díaz quien ahora tiene que explicar las razones que lo llevaron a acosar a un alto funcionario por inquina personal o quizá delegada de la orden a la que pertenece, el Opus. Un asunto bochornoso del que Palinuro se ocupó hace un año porque se honra con la amistad del dicho funcionario, en un post titulado Mi amigo Jaime. El ministro ha de explicar cuál es el sentido de emplear fondos públicos en satisfacer la sed de venganza de una secta. Y, si no puede hacerlo, debe dimitir.

Dimitir debiera hace ya mucho un presidente del gobierno que no está intelectual ni moralmente a la altura de la tarea que los dioses le han deparado.

Pero lo más sorprendente de todo, lectores, es que la oposición no plantee esa necesidad.

(*) Catedrático de Ciencia Política en la UNED   

El presidente de Jazztel asegura que Pablo Iglesias suena "exactamente igual" que Fidel Castro en 1959

MADRID.- El presidente y principal accionista de Jazztel, el cubano exiliado Leopoldo Fernández Pujals, afirma que el discurso del líder de Podemos, Pablo Iglesias, "suena exactamente igual" al del expresidente cubano Fidel Castro en 1959.

   "Lo que dice este individuo (en alusión al político español) suena exactamente igual que lo que salía de la boca de Fidel Castro en 1959", asegura el empresario cubano.
   El máximo accionista de Jazztel aprecia en el discurso de Iglesias, al igual que en el de Castro hace más de medio siglo, constantes alusiones sobre "si el rico no se qué, el rico no se cuánto".
 "Una persona que quiere presidir un país debe unir a todo el mundo y tratar de conseguir que, el que no tiene, tenga la oportunidad de poder levantar cabeza. Pero no se puede expropiar propiedades. Eso lo hacen los comunistas", asevera.
   Fernández Pujals dejó claro que Fidel reveló "que era comunista cuando ya tenía la sartén agarrada por el mango, no lo dijo en el 59".
   Para el empresario, el resurgir de Podemos en España se debe a los casos de corrupción que salpican en los últimos años el panorama político del país. "Puede que metan la pata, igual que en Cuba metieron la pata porque el cubano quería quitarse de arriba una dictadura (la de Fulgencio Batista). Llega Fidel Castro mintiendo por cada orificio de su cuerpo y, ya después, dice que es marxista-leninista", apostilla.
   "Éste (Pablo Iglesias) está diciendo que desea modificar su postura y comportamiento hasta conseguir el poder. Está diciendo lo mismo que Fidel Castro", reitera el empresario, quien advierte de que si Podemos gana las elecciones, la sociedad española "tiene una garrapata ahí que no te la quitas ni echándole alcohol".
   El empresario ha manifestado que siente "tristeza" ante la situación política actual de España, bromeando al asegurar que "ser ladrón debe ser una profesión. Un ejecutivo o un político deben ser éticos".
 "La palabra que siento es tristeza de que existiera durante tanto tiempo tanta corrupción en tantos lugares. Parecía que debajo de cada alfombra que levantases ibas a encontrar un corrupto", lamenta.