MADRID.- Izquierda Unida trabaja en la propuesta de
un Estado federal, republicano, solidario, plurinacional y democrático
que reconozca el derecho de sus territorios a la secesión por una
mayoría cualificada, ya que considera que "el derecho a convivir es algo
que no se puede imponer por la fuerza".
El coordinador federal de IU, Cayo Lara, ha presentado este
viernes la Conferencia sobre modelo de Estado que el partido celebrará
mañana junto al líder de la coalición en Andalucía, Diego Valderas,
quien ha coordinado los trabajos de redacción de un texto base que
después deberá ser refrendado por el Consejo Federal de IU.
El partido afronta este debate desde la base de que, a su juicio,
el actual marco constitucional y el Estado de las autonomías está
"quebrado" desde que el Tribunal Constitucional rechazó diversos
artículos del Estatuto de Cataluña aprobado por las Cortes Generales.
Por este motivo, ve con buenos ojos el recurso previo de
inconstitucionalidad para estatutos de autonomía.
Pero además, liga el asunto a la actual situación del Estado
debido a las políticas neoliberales "del bipartidismo con la ayuda de
CiU" y las desigualdades sociales generadas. En este contexto, han
surgido dos posturas: "la recentralizadora del PP que culpa a las
autonomías y entidades locales de un derroche excesivo y el incremento
de los movimientos independentistas bajo el argumento de un déficit
fiscal".
Por ello, IU quiere ofrecer a los ciudadanos una alternativa
basada en un Estado federal que dé solución a los problemas sociales,
así como a los de los territorios "dentro de una democracia
participativa".
"No se puede construir un Estado confrontando
identidades y territorios. Hay que abordarlo desde el conflicto de
clases", ha explicado Lara.
Y aunque su modelo de Estado incluye el derecho a la secesión de
los territorios federados, considera que los ciudadanos deben ser
conscientes de que "no todo es autonomía o recentralización" y existen
otras posibilidades de "convivir y seguir viviendo juntos". De hecho,
Cayo Lara ha aventurado que, a su juicio, en la sociedad catalana serían
muchos más los ciudadanos que optarían por seguir conviviendo en un
Estado federal que aquellos que elegirían "romper o, por otro lado, dar
marcha atrás".
Pero además, ha reivindicado el papel de IU en este debate y ha
recordado que su apuesta por el Estado federal y republicano ya estaba
plasmada en un documento de 1996. "Quienes ahora hablan de esto y se
quieren sumar, bienvenidos sean", ha apuntado en clara referencia al
PSOE. Pese a ello, no ha querido comparar ambos modelos argumentando que
el de los socialistas aún no es conocido.
En este punto, Lara sí que ha hecho hincapié en los derechos
fundamentales y ha censurado a los políticos que se dedican a "aplaudir
la Constitución cada 365 días y violarla los otros 364 días".
"Se están
pasando la Constitución por el forro de las narices", ha denunciado a la
vez que ambos dirigentes han dejado claro que en el nuevo marco de
Estado que proponen no tiene cabida el artículo 135 de la Carta Magna
pactado por PP y PSOE para garantizar la estabilidad presupuestaria.
Además, Cayo Lara ha querido valorar el debate sobre la
publicación de las balanzas fiscales y el modelo elegido para hacerlo,
en el que "cada uno lo hace arrimando el ascua a su sardina". Y aunque
ha asegurado que IU apoya su publicación porque las considera
"importantes" para conocer "cómo se mueven los recursos", ha defendido
que "lo importante son las balanzas sociales".
"Hay un incremento de la pobreza, el paro, las empresas que están
despidiendo con beneficios, las privatizaciones en educación o sanidad.
Esas son las balanzas sociales que hay que publicar para descubrir el
daño que han hecho las políticas neoliberales de PP y PSOE en alianza
con CiU", ha defendido.
Además, ha evitado entrar en las especulaciones sobre un encuentro
entre el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el de la
Generalitat, Artur Mas, y ha defendido que ambos mandatarios deberían
hablar sobre las consecuencias que han tenido sus políticas sobre los
ciudadanos. "Es bueno el diálogo y el entendimiento, pero son dos
polarizaciones que están escondiendo los problemas de sus políticas en
Cataluña y España. A ambos les viene bien la guerra de banderas", ha
advertido.