domingo, 15 de septiembre de 2013

El sindicato UGT denuncia la elevada tasa de infraempleo en España

MADRID.- El sindicato socialista UGT denunció hoy domingo que la crisis económica y la reforma laboral están siendo utilizadas para ofrecer condiciones precarias que han elevado sustancialmente la contratación de personal con capacidades muy superiores al empleo que realizan.

Según el estudio del sindicato, que utiliza datos de la Encuesta de Población Activa, en la actualidad dos millones y medio de ocupados están "subempleados", es decir, trabajan en puestos que requieren menos cualificación de la que tienen o menos horas de las que desean.

"Caminamos hacia un mercado laboral de supervivencia, muchos empresarios utilizan la crisis y la reforma laboral para rebajar las condiciones laborales y salariales", señala el sindicato, que añade que muchos trabajadores "se ven obligados a aceptar cualquier puesto de trabajo para sobrevivir" mientras las empresas llegan hasta a solicitar licenciados para puestos de repartidor.

  "Algunos comportamientos rayan incluso la rapiña laboral al aprovecharse de la necesidad de los españoles de encontrar un trabajo", ha incidido UGT. Para el sindicato, la reforma laboral está siendo un "instrumento muy útil" para los que optan "erróneamente" por competir en base únicamente al abaratamiento de los costes laborales.

   A este respecto, ha recordado que en el segundo trimestre del año, según los datos de la Contabilidad Nacional, los costes laborales cayeron un 2,3%, "en clara contraposición" con los beneficios de las empresas que crecieron un 3%

También advierte de que el 22% de los parados en España cuenta con titulación superior.

El número de parados con titulación superior se ha multiplicado casi por cuatro desde el inicio de la crisis, pasando de 382.000 parados titulados en 2007 a los 1,3 millones actuales,  según ha denunciado la Unión General de Trabajadores (UGT).

   Asimismo, el sindicato ha puesto de manifiesto que 2,5 millones de ocupados están subempleados, es decir, que trabajan en puesto de trabajo que requieren menos cualificación de la que poseen o lo hacen menos horas de las que desea.

   La Unión General de Trabajadores considera que los problemas de España son causa de una "dejación de poderes públicos, de aplicación de políticas económicas erróneas y contraproducentes y de ausencia de visión estratégica para propiciar el cambio del modelo productivo español".

   Por último, ha pedido al Gobierno que apueste por la protección frente al desempleo, puesto que en la actualidad, casi 4 de cada 10 parados registrados en las oficinas de empleo carecen de prestaciones, lo que según UGT está elevando los niveles de pobreza y exclusión social.

Las políticas de ajustes en Europa traerán más pobreza

BRUSELAS.- Las políticas de ajuste económico impuestas desde Berlín y Bruselas a los países de la Eurozona pueden generar entre 15 y 25 millones de pobres de aquí a 2025, según cálculos de la Ong española Oxfam. Si esos vaticinios se cumplen se ratifican las opiniones de analistas y economistas que rechazaron los rescates financieros y las condiciones bajo las cuales la llamada troika hizo las ofertas.

También serán válidos los justos reclamos de las protestas populares contra las exigencias del Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea, esa troika de prestamistas internacionales de las naciones europeas.

España, Grecia, Portugal, Italia, Irlanda y Chipre han sido víctimas de una fórmula aplicada por primera vez en mayo de 2010, tras conocerse la compleja situación económica de Atenas, que al borde la quiebra accedió a "un generoso monto" para evitar su caída.

Desde entonces se estableció que cualquier nación en riesgo, perteneciente a la Eurozona, podría acceder al aporte de fondos para evitar el derrumbe de la economía europea siempre que cumpliera con una serie de requisitos.

Dichas ayudas no eran simples donaciones, pues la troika exigía garantía de pago, lo que lógicamente complicó a las naciones europeas.

Ejemplo de eso son los compromisos asumidos por Grecia para recibir el rescate: aumento del impuesto al valor agregado, rebaja de las pensiones, despidos masivos de funcionarios públicos, pérdida de poder adquisitivo de la población y cierre de negocios.

El citado informe de Oxfam asegura que las políticas de austeridad tienen como efecto agravar la pobreza y las desigualdades, pues con ellas solo se beneficia el 10 por ciento de la población, las capas más ricas.

Las estadísticas publicadas en los últimos años por la Comisión Europea ratifican esa aseveración y demuestran un aumento de la desigualdad en casi todo el continente, pero principalmente en los países que más están ajustando sus economías mediante un rescate.

Según las estimaciones de Oxfam Grecia, Portugal, Irlanda, España e Italia podrían convertirse, en algunos de las naciones más desiguales del mundo.

Apunta esa ong que a finales de 2011, unos 120 millones de europeos vivían en la pobreza, considerado como tal por Bruselas a quien ingresa menos del 60 por ciento del salario medio de su país.

A partir de ahí el informe plantea que si la política económica del bloque no cambia, esa cifra aumentará hasta 146 millones de personas en poco más de una década, convirtiendo en pobre a la cuarta parte de la población de la Unión Europea.

Tan es así que Oxfam critica los ajustes y la forma de aplicarlos, además acusa a los gobiernos de recortar los programas de beneficio para las capas más desfavorecidas, como seguridad social, salud y educación, a la vez que reduce los derechos de los trabajadores y va hacia un modelo fiscal generador de más desigualdad.

Se aprecia en el texto, titulado La trampa de la austeridad, una acusación a la reducción desmedida de la deuda, que además de no reducirla originó millones de desempleados, ya que los adeudos privados de los bancos pasaron al sector público.

Para solucionar tal situación Oxfan propone reestructurar o cancelar la deuda pública, porque "existen alternativas claras a las actuales políticas de austeridad".

Algunos empresarios españoles aprovechan la crisis para explotar a sus empleados / Diego Gafo

La semana pasada, un conocido portal de internet de búsqueda de empleo publicó una oferta de repartidor de bollos, en la que se exigían recién licenciados en Administración y Dirección de Empresas y con carné de conducir con una antigüedad de dos años. El sueldo oscilaba entre los 12.000 y 15.000 euros brutos al año y la jornada laboral comenzaba a las 4 de la mañana para poder entregar los bollos. Tras la sorpresa popular, que acabó por volverse irritación ante semejante anuncio, la empresa finalmente decidió retirar ese requerimiento. Su dirección justificaba ese requerimiento por la posibilidad de promoción. Cabe destacar que antes de retirarlo se habían inscrito en la oferta más de 600 solicitantes...

Otro claro ejemplo es el de mi amiga Dulcinea del Toboso —nombre ficticio— que trabajaba en una ONG de renombre internacional. Estaba supliendo una baja por enfermedad, y cuando llegó el mes de agosto, dicha ONG decidió despedirla para ahorrarse así su sueldo durante las vacaciones, con la promesa de contratarla de nuevo en septiembre. Pero no fue así, llegada la fecha, le propusieron incorporarse de manera voluntaria a su puesto, a lo que ella tuvo que negarse y aceptar el trabajo de saladora de puercos, donde dicen que tuvo la mejor mano en toda la Mancha (Don Quijote, Primera parte, capítulo IX), puesto que tenía que hacer frente a la hipoteca y a que sus hijos tenían la desagradable costumbre de comer todos los días... ¡e incluso tres veces! Hay gente que malcría a sus hijos de forma descarada.

Son solo unas muestras de la situación del mercado laboral. Las podríamos contar por miríadas. Ante la carestía de empleos, la gente ha de aceptar cualquier trabajo. Esto es perfectamente comprensible. Todos tenemos muchos gastos. Lo que no es admisible bajo ningún concepto es que los empresarios quieran confundir trabajadores con materia prima que puede utilizarse hasta agotarla. Hasta exprimirla, es decir, quieren esclavos. El día que descubran que el trabajador es el mayor activo de la empresa quizá la cosa cambie. No se puede despreciar a la gente. Es muy respetable el trabajo de repartidor de bollos, pero quizá no sea necesario tener una licenciatura para ejercerlo. Que luego no se quejen nuestros políticos por la fuga de cerebros, aunque haya quien no lo vea negativo o lo llame "movilidad exterior".

Piensen. Sean buenos.

Nuestro derecho a la rebelión / Pascual Serrano

Esas dos mentes brillantes y valientes que son Julio Anguita y Juan Carlos Monedero protagonizan una conversación de un centenar de páginas recogida por la editorial Icaria bajo el título A la izquierda de lo posible. Hay una parte que me ha parecido de gran interés. Es cuando Anguita plantea que los actuales gobernantes se están situando fuera de la ley en la medida en están ignorando o desmantelando derechos como el del trabajo, la vivienda, la salud, la educación, una pensión digna, la alimentación, puesto que están conculcando la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Constitución Española o la Carta Social Europea ratificada por España en 1985.

Es un enfoque interesante porque ya no necesitamos hablar en nombre del marxismo ni siquiera de la izquierda. Basta con desempolvar esas legislaciones que tienen un predicamento y aprobación universal y, a continuación, mostrar que los gobernantes están vulnerando el Estado de Derecho, están en la ilegalidad. De modo que nosotros estamos dentro y reivindicando la ley, y el gobierno fuera y vulnerándola.

La segunda deducción es que en la tradición de los históricos movimientos de liberación aplaudidos por toda la sociedad, e incluso del cristianismo, se encuentra el derecho a la rebeldía ante un gobierno despótico que no respeta la legalidad. La declaración de independencia de los Estados Unidos del 4 de julio de 1776 plantea el derecho a luchar para que haya un gobierno justo, incluso deponer al que hay si no cumple (Preámbulo: “Pero cuando una larga serie de abusos y usurpaciones, dirigida invariablemente al mismo objetivo, evidencia el designio de someter al pueblo a un despotismo absoluto, es su derecho, es su deber, derrocar ese gobierno y proveer de nuevas salvaguardas para su futura seguridad y su felicidad”). 

Igualmente la Declaración de Derechos Humanos de 1789, en su artículo 2, establece que la finalidad de toda asociación política es la conservación de los derechos naturales e imprescriptibles del hombre, y que uno de tales derechos es la resistencia a la opresión. Por su parte, la Constitución de 1793, elemento clave del racionalismo ilustrado francés, plantea el derecho a la insurrección (Artículo 35: “Cuando el gobierno viola los derechos del pueblo, la insurrección es, para el pueblo y para cada una de sus porciones, el más sagrado de los derechos y el más indispensable de los deberes”).

John Locke, considerado padre del liberalismo moderno, establece que la autoridad del Estado se sostiene en los principios de legalidad y respeto de los derechos humanos. Esa autoridad deja de ser legítima si deja de asegurar los derechos naturales. En su Tratado sobre el gobierno civil (1690), defiende el derecho a la rebelión señalando que si el pueblo es sometido a la miseria y padece las injusticias del poder arbitrario, entonces “maltratado y gobernado contra Derecho, estará siempre dispuesto a quitarse de encima una carga que le resulta pesadísima”.


Estas ideas tiene su origen en los teólogos cristianos. El dominico Francisco de Vitoria reconoce la licitud de robar cuando el hambre hace peligrar la vida humana o negarse a pagar un tributo en caso de que fuera injusto (Relecciones teológicas). El jesuita Juan de Mariana razonó acerca del derecho a la insubordinación (Del Rey y de la Institución real 1598-1599). El padre Francisco Suárez (Discurso de leyes, 1612) reconocía la posibilidad de desobedecer y derrocar a quien detenta la autoridad cuando, ejerciendo el mando, incumple y vulnera sus funciones. 


Pues bien. Hoy nos están arrebatando nuestras viviendas (desahucios), nuestra educación (disminución de profesorados, tasas y fin de las becas), nuestra sanidad (disminución de personal, cierres de hospitales y servicios de urgencias), nuestros derechos sociales (liquidación de la ley de dependencia), nuestras libertades públicas (represión de las manifestaciones, sistemas de vigilancia), nuestros derechos laborales (seis millones de parados, congelaciones y disminuciones salariales, facilidades para los despidos, precariedad laboral). 


No hace falta ser Lenin ni Rosa Luxemburgo para llamar a la rebelión. Los inspiradores de la Ilustración, los que redactaron la Declaración Universal de Derechos Humanos, los sacerdotes del siglo XVI y los filósofos liberales hoy estarían sumándose al levantamiento. Al otro lado están los miserables que se escandalizan cuando nos atrevemos a expropiar dos carritos de supermercados. Es hora de que cada uno decida en qué bando se sitúa.

Un sistema corrupto / Xavier Caño Tamayo *

A partir de los años 60, en España unos cuantos aprovechados, en íntimo contubernio con la dictadura franquista, se enriquecieron velozmente con la acelerada construcción de miles de enormes, desangelados y feos bloques de pisos en las grandes ciudades. Millones de viviendas mediocres para ser habitadas por millones que, huyendo de pobreza y hambre de todas las regiones del Estado, emigraban a Cataluña, Madrid y País Vasco, sobre todo. Décadas después, otro lodazal de especulación y corrupción inmobiliarias se reinstaló en el reino de España. A las construcciones masivas de edificios de viviendas de antaño se unió el ataque contra las costas, concentraciones turístico-estivales, proliferación de campos de golf y de puertos deportivos. Escenario fértil para la corrupción.
 
Según escribe Carlos Sánchez, “no hay presidente de comunidad autónoma que no haya creado una red clientelar a su alrededor con empresarios locales que han comido y bebido de forma copiosa del presupuesto. Es el origen de la corrupción político-económica en España: élites locales que han engrasado el sistema de partidos para ganar concursos y concesiones públicas”.
 
Así es. Los tribunales españoles investigan hoy 1.661 casos de corrupción política y financiera y más de 300 políticos profesionales españoles están actualmente imputados por presunta corrupción. Según el Barómetro Global de la Corrupción 2013 de Transparency International, el 86% de españoles considera corrupto este país.
 
The New York Times publicó un extenso artículo sobre la corrupción en España, donde afirma que los jueces españoles investigan a unos 1.000 políticos (desde concejales y alcaldes, consejeros y altos cargos autonómicos a ex ministros del Gobierno). La connivencia entre élites políticas y empresariales es cada vez mayor en España según Pascual-Ramsay en Financial Times. Friedrich Schneider, de la Universidad Johannes Kepler de Linz, afirma que la corrupción en España es un “1% del PIB”. En realidad, los casos de corrupción que aparecen en los medios desde hace años no son solo la actuación de individuos sinvergüenzas, son tramas de saqueo económico de alcance estructural. 
 
Pero la corrupción no afecta solo al Reino de España. El Banco Mundial considera que la corrupción supone del 0,5% al 2% de la riqueza nacional en los países de la OCDE, los 30 más desarrollados del mundo. Y la Comisión Europea calcula que la corrupción cuesta a Europa 120.000 millones de euros anuales: 1,1% de su riqueza.
 
Curiosamente, Transparency International, organización global contra la corrupción, olvida en sus informes que hay corrompidos y corruptores. Denuncia a muchos corrompidos en África, Asia y Latinoamérica, pero ignora que grandes empresas y corporaciones de Estados Unidos y de la Unión Europea sobornan en esos países para obtener más beneficios. No hay corrupción sin corruptores.
 
Y es que la corrupción está incrustada en el corazón del sistema. Hasta hace un tiempo, por ejemplo, en Francia las empresas podían deducir fiscalmente el pago de sobornos de funcionarios o políticos de otros países. Y en Alemania, pagar sobornos en el extranjero era deducible de los impuestos como gastos empresariales, hasta hace cinco años. La presión de la ONU hizo desaparecer tal indignidad. 
 
La lista de grandes casos de corrupción en Estados Unidos y Europa es larga. Los broches podrían ser un Berlusconi promulgando leyes de inmunidad para evitar sus condenas por corrupción o que en Alemania directivos y ejecutivos de casi todas las grandes corporaciones se hayan sentado en el banquillo de los acusados en los últimos años. Cajas ocultas, dinero negro, sobornos, engaño organizado, estafas, manipulaciones contables…Una veintena de corporaciones empresariales alemanas han estado o están en el punto de mira por manipulación y fraude. 
 
Es curioso, porque el FMI y el Banco Mundial prometían en sus informes de los años 80 que la privatización de lo público (que amenazaba ya a medio mundo) suprimiría la corrupción. Pero ha sido justamente lo contrario. Marx tenía razón al escribir que “todas las naciones capitalistas abrazan periódicamente el fraude, pretendiendo ganar dinero sin producir”. 
 
Según Denis Robert, periodista de investigación financiera, este sistema económico-financiero está viciado de raíz y no hay voluntad real de eliminar la corrupción. A los hechos me remito. Para abundar en la cuestión, podríamos echar un vistazo al oscuro mundo de los paraísos fiscales, del fraude fiscal sistemático, del blanqueo de dinero sucio en plan industrial… Corrupción es mucho más que lo que denuncia Transparency International y ocupa las portadas de los periódicos. Es el sistema capitalista el que está ya definitivamente corrompido.
 
(*) Miembro de ATTAC-Madrid

La finca de Felipe González se llama 'El Penitencial' y vale un millón de euros

MADRID.- Felipe González ha adquirido la finca 'El Penitencial' en la Sierra de Guadalupe (Cáceres), de 120 hectáreas, por un millón de euros.La finca es un pequeño espacio de otra finca mayor, El Común, de más de dos mil hectáreas y propiedad del constructor Javier Vázquez, amigo del Rey y exsocio de Mario Conde. 

El expresidente del Gobierno, casado en segundas nupcias con Mar García Vaquero, ha hecho todo lo posible por pasar desapercibido en la zona, si bien ha solicitado los permisos necesarios para rehabilitar la vivienda existente en la finca, de 600 metros cuadrados en dos plantas.
Según 'El Mundo', lo primero que quiere hacer es cambiar el escabroso nombre.
Pese a trabajar para uno de los hombres más ricos del planeta, el empresario mexicano Carlos Slim, González no atraviesa su mejor momento económico.
De hecho, se vio obligado a congelar Tagua Capital, su fondo de capital riesgo, este año ante la falta de inversiones.
'El Penitencial' será el primer nido de amor que comparta con su segunda mujer, Mar García Vaquero.

La cronología de los ERE en las cajas: de las jugosas prejubilaciones a los despidos con 20 días por año

MADRID.- Con la negociación del nuevo expediente de regulación de empleo (ERE) de CatalunyaCaixa, se completa la segunda ronda de despidos acometida por las entidades en manos del Estado -Bankia, Novagalicia y la catalana-, si bien las condiciones ofrecidas a los afectados varían mucho entre el primer proceso y este último. De generosas prejubilaciones e indemnizaciones de 45 días por año, a la amenaza de aplicar a rajatabla la reforma laboral (20 días por año y 12 mensualidades) que ha puesto sobre la mesa el banco que preside José Carlos Pla.

Sólo entre estas tres entidades se acometerá, una vez que el proceso llegue a su fin, un recorte de más de 16.000 empleados. El mayor ajuste ha sido el realizado por Bankia, un total de 8.200 empleados que suponen casi un 35% de la plantilla que acumularon las siete cajas de ahorros en el momento de su fusión.

A principios de febrero, la entidad acordó con los sindicatos un recorte de 4.500 empleados. Las medidas de salida se concretaron en diversas modalidades de bajas incentivadas que se segmentan en función de la voluntariedad, edades y la evolución del plan de recolocación. No obstante, la media se situó en 30 días por año trabajado, con el límite de 20 mensualidades.

Banco Financiero y de Ahorros (BFA), la matriz de Bankia, surgió de la fusión de Caja Madrid, Bancaja y otras cinco entidades de menor tamaño (cajas de Ávila, Segovia, La Rioja, Insular de Canarias y Laietana). El proceso vino aparejado de un ERE para 3.700 trabajadores, a unas condiciones sensiblemente mejores. Así, los trabajadores que se acogieron a las bajas voluntarias cobraron una indemnización de 45 días por año trabajado con un tope de 42 mensualidades, más una prima que oscilaba entre los 10.000 y los 30.000 euros. La mayor parte del ajuste se realizó, sin embargo, a través de prejubilaciones. Estos empleados con al menos 55 años que se acogieron a las prejubilaciones recibieron el 95% del sueldo del último ejercicio.

También en febrero, Novagalicia acordó un ERE para 1.850 empleados de los cuales un máximo de 455 pueden acogerse a prejubilaciones cobrando el 80% de su sueldo. El resto del recorte de la plantilla se acometerá a través de bajas incentivadas, con unas indemnizaciones de 30 días por año, con un máximo de 22 mensualidades, más una prima de 2.000 euros por cada tres años de antigüedad. En ningún caso la indemnización podrá superar los 250.000 euros.

La fusión de Caixa Galicia y Caixanova provocó un primer ERE para 1.200 empleados, que se llevó a cabo principalmente a través de prejubilaciones de mayores de 55 años que recibieron un 85% del sueldo. En julio de 2011 anunció un nuevo ERE para 350 empleados, a los que se sumaron luego otros 700. En estos casos las indemnizaciones fueron las más generosas hasta el momento, de 45 días por año trabajado, con un máximo de 42 mensualidades. En total, los casi 8.000 empleados con los que contaban las cajas gallegas se han reducido a la mitad.

El último ajuste pendiente es el de CatalunyaCaixa, en la que la dirección ha planteado como propuesta 2.453 despidos con el mínimo legal permitido, es decir, 20 días por año y 12 mensualidades.

La entidad aplicó inicialmente un recorte de 1.300 empleos, ampliado con otras 330 bajas incentivadas. Los trabajadores mayores de 60 años se pudieron prejubilar recibiendo el 90% del salario neto, mientras que los de entre 56 y 59 años contaron con el 80% del salario neto. Las indemnizaciones de las bajas incentivadas dependieron de la antigüedad, llegando hasta los 30 meses de sueldo (2,5 años) para quienes llevasen más de 12 años trabajando en una de las cajas. El recorte total podría alcanzar a más de 4.000 empleados, de los alrededor de 8.500 que había en la fusión de Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Manresa.

Bankia, Novagalicia y CatalunyaCaixa son las tres entidades actualmente en manos del Estado, y también las que más ayudas públicas han recibido. En total, Bankia ha recibido 22.424 millones, por los 12.052 de la catalana y los 9.052 de la gallega.

Aquí no dimite ni Dios / Rafael de Loma

Lo de Ana Botella en Buenos Aires creo que va a cambiar la historia de España. Hasta ahora no estábamos seguros de ser un país de cachondeo. Ahora ya lo sabemos con certeza. Había españoles que pensaban que España era un ejemplo de país serio. Hubo hasta quien afirmaba en sus soflamas fascistas de nuestra historia reciente que lo único serio que se podía ser en este mundo era español. Si tenías la desgracia de nacer en cualquier otro lugar de la tierra eras para siempre un maldito sin valores, sin decencia, sin imperio, sin ideales. Un bandarra, sin alma, sin fe. Sólo eras un ser humano serio si eras español, si habías nacido en este país o bajo su manto protector. Y aún así, si no seguías las normas del nacional catolicismo, eras un rojo, algo mucho peor y con más riesgos aún que un extranjero.

No sabíamos con seguridad plena que éramos un país de cachondeo. Y vino Ana Botella y lo pregonó delante de la televisión universal. Un millón y pico de euros a un espabilado asesor americano y tres semanas de ensayo bastaron para que la alcaldesa no elegida nos abriera los ojos y mostrara su inglés risible con la frase, ya universal, de «relaxing cup of café con leche en Plaza Mayor». Decir que todo el mundo se echó a reír con el ridículo discurso sería no reflejar la realidad. Lo correcto sería decir que no todo el mundo se echó a reír, sino que muchos nos carcajeamos y otros tantos sintieron vergüenza ajena y dejaron de mirar la pantalla.

¿Algún iluso pensaba que, tras el vergonzante fracaso, iban a llover las dimisiones? Aquí no se va ni Dios. Ni políticos ni jueces ni gestores. No se van ni con agua caliente. Pensándolo bien, es algo muy humano. Dimites y ¿qué te queda? Te queda el desprecio de todos, de tus amigos y compañeros que suelen ser los primeros en hacerte el vacío, porque el gesto noble de la dimisión será tomado como un reconocimiento de tus errores no como una demostración de decencia. Te queda un porvenir oscuro porque nadie va a fiarse nunca más de ti. Te quedas sin tu sabroso sueldo con el que vivías de P. M. Y te quedas sin tus prebendas, sin tus canonjías, sin tus regalitos de Pascua, sin tu coche, sin el peloteo de tus subordinados, sin tus apariciones regulares en las televisiones. Te quedas en nada? así que ¿para qué dimitir? Es mucho mejor mirar al cielo, silbar, quitarse de la barahúnda y esperar que escampe.

Ana Botella ni siquiera ha esperado a que escampe. Convencida de que este país ya ha demostrado que es un país de cachondeo –lo ha ratificado ella misma– ha decidido iniciar su campaña para las próximas elecciones municipales.

Sabe que de los 182 gañotes que llevó en «el avión de la ilusión» –yo le habría llamado «el avión de los pelotas»– algunos le votarán como alcaldesa para que los vuelva a pasear por el mundo. Japón, más modesta, sólo invitó a 80 y Turquía a 70.

Los expertos, como el que hizo el nefasto discurso, han tenido, tras la ruina de la presentación, más trabajo que nunca. Justificar una debacle de las proporciones de la de Buenos Aires no es tarea fácil. Se ha acudido a todo tipo de argumentaciones, de adversidades, de dificultades, y, sobre todo, se ha echado la culpa, como siempre hemos hecho los españoles, a los masones, a los enemigos de España, a los miembros del Comité Olímpico que nos engañaron con sus falsas promesas. Todos tienen la culpa del descalabro, todos menos los organizadores. Todos menos quienes nos ilusionaron haciéndonos creer que éramos la mejor candidata, que Japón era una mierda radiactiva, que Turquía no era fiable, que sólo España merecía la organización de la Olimpiada Madrid 2020. Pero llegó Ana Botella y su «relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor» y nos abrió los ojos.

¿Se ha ido alguien? ¿Ha dimitido alguien? Me darán la razón de que somos un país de cachondeo. Y que, sabiéndolo, nuestro futuro empieza a cambiar.

Madrid 2020: una estancia a todo lujo en Buenos Aires para volver sin los Juegos

BUENOS AIRES.- Caminó unos 100 metros desde el Hotel Hilton. Se sentó. Suspiró. Había sido un día agotador. Sábado 7 de septiembre. 14 horas en Buenos Aires. La Princesa Letizia bajaba las revoluciones después de escuchar a su marido, el Príncipe Felipe, exponer la candidatura de Madrid 2020 ante los 106 miembros del Comité Olímpico Internacional (COI). Una prueba de fuego cargada de tensión. La Princesa de Asturias se acomodó en un sillón blanco del salón… y sorprendió a todos: se descalzó sus zapatos rojos y, durante unos quince minutos, reposó sus pies en una mesita baja.

“Nos quedamos todos con la boca abierta”, dijo una empleada, la misma que relató la escena, fuera de todo protocolo. Letizia se sentía como en casa. La Princesa estaba en Calima, un salón de eventos (http://www.calimabuenosaires.com.ar/fotos_corp_mad.php) alquilado por la delegación española y que sirvió como lugar de reunión para la tropa olímpica. Allí se ofrecía desayuno, almuerzo, merienda y cena a unos 300 españoles que llegaron a Buenos Aires para apoyar el proyecto. Lugar no faltaba. El coqueto salón, decorado con piedra natural, cuenta con 452 metros cuadrados para organizar este tipo de eventos.
Estancia en Buenos Aires
Pese al fracaso ante el Comité Olímpico, la delegación española se permitió algunos gastos en Buenos Aires. Dispuso de un hotel cinco estrellas para 300 personas, contrató un salón exclusivo para eventos, pagó el viaje de más de 100 periodistas (uno de este diario) y arrendó un piso de 200 metros cuadrados en el barrio más caro de la ciudad. Hasta trajo desde España 170 kilos de ibérico y hospedó al mejor jamonero del mundo bajo el mismo techo que el Príncipe Felipe. El hotel y los viajes formaban parte de intercambios con patrocinadores.
Calima fue el escenario de la derrota. Los carteles con la leyenda “Madrid 2020” colgados de la pared quedaron inmediatamente fuera de juego. El sueño había terminado. Mariano Rajoy, los Príncipes de Asturias, Ana Botella y Alejandro Blanco lo observaron por televisión desde una pantalla gigante. “La más angustiada era Doña Letizia”, repiten los empleados del local, que todavía recuerdan su decepción.
Fueron jornadas full time en Calima. Aunque desde el salón ocupado por la delegación hispana no quisieron revelar el coste de esta instalación, su alquiler cuesta 2.000 euros por día. La comida y la bebida para todos los invitados elevan el presupuesto hasta casi 10.000 diarios, según fuentes del sector.
La ubicación de algunos de los lugares que frecuentó la delegación española era estratégica: estaban en el corazón de Puerto Madero, la zona más cara de la ciudad de Buenos Aires. Desde allí se puede observar, por ejemplo, la Torre YPF construida por el reconocido arquitecto César Pelli o la Casa Rosada. Una zona cómoda incluso para recorrer a pie el circuito entre el Hilton y el Hotel NH Tower (http://www.nh-hotels.com/nh/en/hotels/argentina/buenos-aires/nh-city--and--tower.html), lugar de hospedaje en el distrito histórico de la candidatura española.
Un cinco estrellas sólo para la delegación española
Jueves por la noche. Doscientas personas esperaban su turno en el lobby del Hotel NH Tower. Un check-in multitudinario. Desembarcaba el chárter de Air Europa, esponsor de Madrid 2020. Llegaron deportistas, periodistas y algún político, todos a la espera de subir a las habitaciones.
Durante tres días, este hotel de cinco estrellas estuvo cerrado al público. Todas las habitaciones estuvieron a disposición de la comitiva madrileña. “Llegaron a ser casi 300 personas hospedadas”, asegura Diego Montero, gerente corporativo de El Corte Inglés Viajes, que organizó parte de la excursión a Buenos Aires. Fueron 369 habitaciones y 11 salas a disposición, afirman fuentes consultadas por este periódico.
Allí se hospedaron todos. Los miembros de la Casa Real. Las estrellas del deporte, como Pau Gasol y Sergio “Maravilla” Martínez. La comitiva política. Sólo hubo dos excepciones: Ana Botella prefirió dormir en la residencia del embajador en Argentina, Román Oyarzún Marchesi, en el barrio de Palermo; y Alejandro Blanco, que se alojó en el Hilton, epicentro del lobby olímpico.
Durante una semana, el NH Tower se transformó en “La Casa de España”. También se utilizaron sus salones, como el Gaudí, para las conferencias de prensa. El sábado por la noche, después de la última aparición pública frente a los periodistas, también se usaron para hacer la fiesta final de Madrid 2020. Un agasajo para 400 personas, entre ellos Rajoy y el Príncipe.
“Nos sorprendió la sencillez del Príncipe. Se alojó en una suite común”, resaltó un miembro de la comitiva poco acostumbrado a tratarlo. Fuentes del hotel confiesan que esperaban que se hospedara en la suite presidencial, la habitación más lujosa del edificio, que después fue ocupada por Mariano Rajoy.
Consultados por El Confidencial, desde El Corte Inglés se negaron a revelar el coste de la estancia en Buenos Aires. Según pudo saber este periódico, la habitación más económica del hotel cuesta 125 dólares, la suite que usaron los Príncipes, 175, y la suite presidencial se cotiza hasta los 400 dólares.
170 kilos de jamón ibérico
“Era muchísima gente. Incluso había más de 100 periodistas que llegaron todos juntos y se alojaron ahí. Estaba Televisión Española, pero también medios privados”, comentó una fuente que vivió el día a día de la delegación. Desde El Corte Inglés, Montero ratificó que muchos periodistas se hospedaron en el NH, aunque evitó dar detalles. “No podría precisiones la cantidad. El viaje en avión fue cortesía de Air Europa. En realidad, fue parte de la negociación como esponsor de Madrid 2020”.
Del buen comer tampoco se privó la delegación española. Trajo a Buenos Aires 170 kilos de jamón ibérico. Por eso, la comitiva incluyó a Florencio Sanchidrián, el mejor cortador de jamón del mundo, que también se alojó en el NH.
“Más austeros no podíamos ser. Nos hubiese gustado traer más miembros del equipo de Madrid 2020. Eran menos de diez”, dice Montero, quien evitó responder por qué había tan pocos miembros de la candidatura Madrid 2020 en una delegación de 300 personas.
Los salones del hotel NH y los 452 metros cuadrados de Calima no fueron suficientes. La delegación española también alquiló el cuarto piso del edificio Porteño Plaza I. Una torre de oficinas construida justo enfrente del Hotel. Eran 200 metros cuadrados, distribuidos en siete habitaciones y un salón. Un espacio al que sólo tenían acceso unas 50 personas, dedicado exclusivamente para hacer lobby. Algunos miembros del Comité Olímpico, como el norcoreano Chang Ung y el uruguayo Julio César Maglione fueron vistos mientras cruzaban la calle Olga Cossenttini y atravesaban la impactante entrada vidriada del edificio.
El metro cuadrado de una oficina en el barrio más caro de Buenos Aires cotiza 4.500 euros. Según fuentes del mercado inmobiliario, el alquiler del inmueble sin el equipamiento supera los 2.000 euros.
Esa oficina del cuarto piso también fue utilizada como sala de ensayos y planificación. Allí entrenaron las exposiciones que el sábado se hicieron ante los miembros del COI en la asamblea definitiva. “Sí, escuché el ensayo de Botella. Es increíble que en la exposición sonaba igual y nadie le haya dicho nada”, confiesa una fuente que tuvo acceso al edificio durante toda la semana.
Los gastos no se limitaron al alquiler. “Trajeron de todo. Perdí la cuenta de la cantidad de muebles que subieron. También trajeron muchas cosas de electrónica y sonido. Equiparon la oficina a nuevo”, confiesa un conserje del edificio. Y agrega: “Nos quedamos con todo lo que sobró. Todavía tengo el vino que el Príncipe se hizo traer desde España. ¿Lo querés?”.