jueves, 7 de febrero de 2013

Activistas denuncian el "incremento vertiginoso de la represión" en Cuba

MIAMI.- La Asamblea de la Resistencia Cubana, que agrupa a casi 50 organizaciones dentro y fuera de Cuba, denunció hoy un "incremento vertiginoso de la represión" desde que el gobernante Raúl Castro asumió el poder, y pidió a la comunidad internacional prestar atención a los derechos humanos en la isla.

El presidente del Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba, Juan Carlos González Leiva, dijo que se han registrado al menos nueve asesinatos de defensores de derechos humanos y seis mil arrestos "arbitrarios" en los últimos doce meses.
"Los allanamientos, golpizas, y agresiones contra los que luchamos por la defensa de los derechos humanos es el récord del régimen de Raúl Castro", afirmó el activista por teléfono desde La Habana (Cuba) en una conferencia de prensa en Miami (EE.UU.)
González Leiva advirtió que "las vidas de los defensores de derechos humanos en Cuba corren peligro"·
La secretaria Nacional Adjunta del Directorio Democrático Cubano (DDC), Janisset Rivero, organización que integra la Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC), dijo que se hace un llamamiento "a la comunidad internacional para que, por favor, mire lo que está pasando dentro de Cuba en el tema de los derechos humanos".
En la conferencia de prensa brindaron su testimonio las disidentes Idania Yánez Contreras y Caridad Caballero Bartista, ambas recientemente exiliadas.
"¿Hasta cuándo seguirá pasando esto en Cuba? Hemos sido víctimas de actos de repudio, producto de uno de ellos mi abuelita murió el año pasado en enero. Mis hijos pequeños han sido golpeados, arrestados, agredidos y tienen muchos problemas por esos traumas", dijo Yánez Contreas de la Coalición Central Opositor.
Aseveró que también "nos han agredido sexualmente sobre todo a las mujeres defensoras de los derechos humanos. El mundo no puede callar ante esto".
Caballero Batista, de la Alianza Democrática Oriental, denunció la "violación" a la libertad religiosa en Cuba y dijo que ella por tratar ir a una iglesia católica en Holguín fue golpeada y arrestada en numerosas ocasiones.
La opositora indicó que su casa fue allanada y su hijo menor arrestado, "entre otras violaciones que no constituyen un caso aislado, sino una práctica sistemática por parte del régimen de la familia Castro".

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