ROMA.- Destacados miembros de la coalición de centro-derecha que encabeza el primer ministro, Silvio Berlusconi, han responsabilizado a la izquierda de los disturbios en los que derivó la manifestación de Roma en respuesta a la convocatoria de movilización global del 15 de octubre.
Así, el ministro de Defensa, Ignazio La Russa, ha afirmado que la violencia es atribuible al menos en parte a la crispación política empleada por la izquierda. "Todo es justificable para deshacernos de Berlusconi, el 'mal de Italia'", ha señalado La Russa. Los violentos, ha añadido, "se aprovechan de este tipo de posturas".
También el senador Maurizio Gasparri ha advertido de la "peligrosa cercanía de ciertos sectores de la izquierda a los protagonistas de la violencia de Roma".
Sin embargo, la oposición de centro-izquierda también ha condenado la violencia y el diputado de Italia de los Valores Massimo Donadi ha pedido que el ministro del Interior, Roberto Maroni, comparezca en el Parlamento para explicar por qué la Policía no adoptó medidas preventivas para identificar e impedir a los violentos participar en la manifestación.
"Estos profesionales de la violencia (...) no vienen de Marte. Queremos que el ministro del Interior nos diga qué pasó", ha declarado Donadi. Desde la oposición también cuestionan la actuación policial debido a que solo se detuvo a 12 personas por los disturbios.
Los propios italianos se preguntan por qué Roma ha sido la única de las más de 900 de todo el mundo en la que ha habido incidentes violentos. "Ayer demostramos una vez más al mundo la anomalía que es Italia y hoy tenemos que sentir vergüenza de nuevo. ¿Por qué solo ha pasado aquí?", se pregunta el editorial de primera página de 'La Stampa'.
Mientras, ya este domingo, un pequeño grupo de manifestantes ha vuelto al lugar de los disturbios para acampar junto a la basílica de San Juan de Letrán. "Somos los verdaderos indignados. Han robado nuestro día", ha declarado uno de los acampados.
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