SANÁ.- Ocho personas, cinco de ellos manifestantes, han muerto en un nuevo repunte de la violencia política este domingo en Saná, según han informado fuentes sanitarias y testigos presenciales. Otra persona más ha muerto en la ciudad de Taiz, en el sur, durante las protestas.
Las fuerzas de seguridad han disparado contra los manifestantes en la capital yemení, con la que ya son al menos 20 los opositores muertos en las últimas 48 horas, según fuentes sanitarias.
"Hasta ahora tenemos cuatro mártires y 13 heridos de bala", ha explicado el médico Muhammad al Qubati, responsable del hospital de campaña levantado por los manifestantes en la calle 60, junto al campamento de los opositores que llevan meses exigiendo un cambio de régimen.
Los testigos presenciales han explicado que las fuerzas gubernamentales atacaron a los manifestantes cuando éstos intentaron entrar en la calle Zubayri, que separa las zonas controladas por las fuerzas lealistas y las del general sublevado Alí Moshen.
Dos hermanos y otro miembro de la misma familia también han fallecido este domingo en Saná por el impacto de un obús en su vivienda, en el barrio de Al Qaa, han informado testigos presenciales. La zona ha sido escenario de enfrentamientos entre las fuerzas leales al régimen del presidente Alí Abdulá Salé y las milicias sublevadas.
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