NUEVA DELHI.- La ministra principal del estado indio de Uttar Pradesh, Mayawati, envió un jet privado vacío a la ciudad de Bombay para que recogiese un par de sandalias, según revela un cable diplomático estadounidense publicado por Wikileaks.
"Cuando necesitaba unas sandalias nuevas, su jet privado volaba vacío a Bombay para recoger sus favoritas", dice un cable que menciona sus "excentricidades, caprichos e inseguridades", citado por los medios de comunicación indios.
En un cable fechado en octubre de 2008 y enviado por el cónsul político de la Embajada de Estados Unidos en Nueva Delhi, se describe a Mayawati como "una ególatra de primer orden" que está "obsesionada con convertirse en primera ministra".
"Teme ser asesinada y pidió al Gobierno central el máximo nivel de protección posible. Además (...), ha construido una carretera privada que va desde su domicilio hasta su oficina, que se limpia en cuanto su convoy, de múltiples vehículos, llega a su destino", dice uno de los cables.
Los documentos, que se basan en entrevistas informales realizadas por el personal de la Embajada en las ciudades indias de Lucknow, Kanpur y Varanasi, indican también que la jefa del Gobierno de Uttar Pradesh tiene nueve cocineros: dos para cocinar, cinco para supervisarles y dos para probar la comida por si ha sido envenenada.
Según los cables, Maryawati "mantiene un control enfermizo sobre todos los niveles del poder" y todas las decisiones deben ser aprobadas por ella o por un reducido grupo de asesores.
Varios periodistas consultados por la Embajada opinaron que la única mejora en la situación de la ley y el orden en Uttar Pradesh, el estado más poblado y uno de los más pobres de India, es que "Mayawati ha centralizado la corrupción en sus propias manos".
Respecto a este tema, los cables precisan que entre sus ingresos figuran "sobornos y comisiones de casi todas las interacciones mantenidas por empresas grandes con el Gobierno estatal".
Mayawati ha erigido decenas de estatuas de sí misma en amplios parques, que ha mandado construir en los últimos años en la capital del estado, Lucknow, aunque ella niega estar rindiéndose culto a sí misma.
