sábado, 5 de noviembre de 2011

Fallece una mujer en la acampada del movimiento 'Occupy Vancouver'

VANCUVER.- Una mujer de unos 20 años que se encontraba en la acampada del movimiento 'Occupy Vancouver' ha fallecido este sábado a causa de una "emergencia médica", en palabras de los Servicios locales de Emergencias y de Bomberos.

   La mujer no respondía a las señales que le hacían el personal de Emergencias y fue inmediatamente trasladada a un centro hospitalario, donde se ha confirmado su muerte.
   El portavoz de los Servicios de Emergencias y de Bomberos de Vancouver, Gabe Roder, ha asegurado que la mujer falleció en una tienda de la acampada, aunque se desconoce si verdaderamente residía en el campamento del movimiento. "No sabemos si se trata de una sobredosis", ha apostillado.
   El alcalde de Vancouver, Gregor Robertson, ha insistido nuevamente con motivo de la muerte de la mujer en que la acampada debe ser retirada por motivos de seguridad, si bien no ha precisado la fecha en la que está prevista su desmantelamiento.
   Testigos presenciales han explicado que dos ambulancias han llegado tras vivirse momentos de caos en la acampada. Como consecuencia, se ha cancelado la asamblea convocada para última hora de la tarde y cerca de un centenar de personas han acudido a la vigilia por la mujer, quienes algunos han sostenido que le llamaban Ashley.
   Chris Shaw, de 61 años, fue la primera persona en atenderla y ha indicado que la halló sin pulso. Junto con otros dos 'indignados', practicó los primeros auxilios a la mujer durante diez minutos, mientras esperaban la llegada de los servicios sanitarios. No obstante, no ha sabido clarificar cuánto tiempo llevaba sola en la tienda en dichas condiciones.
   El jueves un hombre fue atendido por los servicios médicos en la acampada de Vancouver con sobredosis. La rápida respuesta de los manifestantes permitió salvar la vida al individuo, según ha informado el diario estadounidense 'The Vancouver Sun'.

La asediada Homs sufre nuevas muertes de civiles sirios

DAMASCO.- El fuego de tanques sirios causó el sábado la muerte de al menos cinco civiles e hirieron a decenas de personas en la asediada ciudad de Homs, dijeron activistas y residentes, despertando dudas sobre si un plan de paz de la Liga Árabe podrá poner fin a meses de derramamiento de sangre en la represión por la revuelta popular.

En El Cairo, el jefe de la Liga Árabe dijo que la organización está muy preocupada por la violencia e hizo un llamamiento a Damasco para que cumpla con las medidas acordadas con los estados árabes a fin de proteger a los civiles y poner a Siria rumbo al diálogo.
"El fracaso del plan de paz árabe podría generar resultados catastróficos para la situación en Siria y la región en su conjunto", dijo en un comunicado el secretario general del organismo, Nabil Elaraby.
Las víctimas en Homs, en la víspera del importante festejo musulmán de Eid al Adha, llevaron al menos a 82 el número de civiles que habrían muerto en Homs desde el martes a manos de los militares que tratan de aplastar las protestas contra el presidente Bashar el Asad, y un creciente levantamiento armado.
"Edificios enteros han sido destruidos por el fuego de los tanques. El pan se ha terminado y la gente que resulta herida en las calles se está muriendo en el mismo lugar porque nadie puede llegar a ellos", relató Samer, un activista local.
Las autoridades dicen que las fuerzas de seguridad están luchando contra bandas de radicales que han estado asesinando a civiles y figuras prominentes en Homs, una ciudad de un millón de habitantes situada unos 140 kilómetros al norte de Damasco.
Medios estatales señalaron esta semana que varios "terroristas" habían muerto y que se incautaron de arsenales con lanzagranadas propulsados por cohetes, bombas incendiarias y explosivos.
El Gobierno sostiene que extremistas islámicos y bandas armadas respaldadas por extranjeros han matado a 1.100 miembros de las fuerzas de seguridad desde que en marzo comenzó el levantamiento contra 41 años de gobierno de la familia Asad. Naciones Unidas estima que más de 3.000 personas han muerto en la represión.
El viernes, la televisión estatal siria anunció una amnistía para cualquier persona en posesión de armas si informaba a la policía en el lapso de una semana, "en tanto no hayan cometido ningún delito de muerte". El mismo día, fuerzas de seguridad mataron al menos 19 personas e hirieron a decenas más en toda Siria, según activistas.
La amnistía no parecía formar parte del plan de la Liga Árabe, que Siria aceptó el miércoles y que establece que el Ejército abandonaría las ciudades más levantiscas, se liberaría a los prisioneros políticos y se iniciarían negociaciones con la oposición en dos semanas. Hasta ahora la oposición ha rechazado cualquier negociación mientras Asad continúe ejerciendo la violencia y ha dicho que el único modo de que vuelva la paz es que el presidente deje el poder.

El régimen sirio libera a más de 550 detenidos pero mantiene la represión

DAMASCO.- El régimen sirio liberó este sábado a más de 550 personas detenidas durante la represión del movimiento de contestación, como primera señal del cumplimiento del plan árabe para resolver la crisis, pero prosigue con sus sangrientas operaciones de seguridad en el país.

Estas liberaciones fueron anunciadas después de que la Liga Árabe llamara a aplicar su plan en Siria, aceptado por Damasco, y advirtiera de una "catástrofe" en el caso de que continúe la violencia.
Los opositores sirios, que siguen pidiendo la dimisión del presidente Bashar al Asad, y los países occidentales expresaron sus dudas de que el régimen llegue a aplicar el plan que aceptó el 2 de noviembre, sobre todo porque desde ese día la represión se cobró más de 50 vidas.
Este plan prevé el cese total de la violencia, la liberación de las personas detenidas durante la represión, la retirada del ejército de las ciudades y la libre circulación de los observadores y de los periodistas internacionales, antes de la apertura de un diálogo entre el régimen y la oposición.
Alrededor de "553 personas detenidas durante los hechos en Siria y que no tienen sangre en las manos fueron liberadas", anunció la agencia oficial Sana, que recalcó que estas liberaciones tuvieron lugar con motivo de la fiesta musulmana de Al Adha.
Sana dio cuenta además de "la liberación reciente de otros 119 detenidos", sin dar detalles.
Las asociaciones sirias de defensa de los derechos humanos y la ONU cifran en varios miles el número de personas detenidas en la represión de la revuelta lanzada el 15 de marzo. Y más de 3.000 resultaron muertas, según Naciones Unidas.
El viernes, las autoridades prometieron una amnistía a las personas en posesión de armas que se entreguen a la policía hasta el 12 de noviembre "si no han cometido asesinatos".
Pero Estados Unidos, que sigue pidiendo la renuncia de Asad, "no aconseja a nadie entregarse a las autoridades del régimen en este momento".
Esta declaración ha irritado al régimen sirio, que denunció "injerencias" de Washington, al que acusa de "apoyar el terrorismo practicado por los grupos armados".
Tanto la oposición como Occidente están convencidos de que el régimen de Asad ha perdido su credibilidad reprimiendo cruentamente la revuelta tras haber prometido reformas que no ha llegado a concretar y liberado a sólo cientos de detenidos en junio pese a haber anunciado una amnistía general.
Sin ir más lejos, este sábado las fuerzas del régimen continuaron con sus operaciones de rastreo y dispersaron por la fuerza varias manifestaciones.
Al menos tres civiles murieron por impactos de bala en Homs (centro) y cuatro "milicianos" prorrégimen perdieron la vida en enfrentamientos con presuntos desertores en Saraqeb (noroeste), según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
Además, los servicios de seguridad detuvieron el jueves a la abogada Asma Sasa, y el director de cine Nidal Hasan desapareció en Damasco, según la Liga Siria de los Derechos Humanos.
"El fracaso de la solución árabe tendría consecuencias catastróficas para la situación en Siria y la región", previno el jefe de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, que instó "al gobierno sirio a tomar medidas inmediatas para aplicar el plan árabe".
Arabi hizo estas declaraciones tras un encuentro en El Cairo con una delegación del Consejo Nacional Sirio (CNS), que reagrupa a la mayoría de la oposición siria.
Según el número dos de la Liga Árabe, Ahmed Ben Hilli, Asad dispone de dos semanas desde la fecha en que aceptó el plan para entablar un diálogo con la oposición, o sea hasta el 16 de noviembre.

Siria condena "las declaraciones irresponsables" de EEUU

DAMASCO.- El Gobierno sirio ha condenado este sábado "las declaraciones irresponsables" de la administración de Estados Unidos que sólo tienen por objetivo incitar a la sedición, apoyar asesinatos y el terrorismo practicado por los grupos de insurgentes armados en contra de los ciudadanos sirios.

   La evidencia de estas interferencias, según la fuente ministerial siria, está en las declaraciones del viernes de la portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Victoria Nuland, en las que aconsejaba a los oposición que no se entreguen a las autoridades sirias a pesar de la oferta del Gobierno sirio de amnistía general realizada ayer.
   Una fuente oficial del Ministerio de Asuntos de Exteriores y Expatriados de Siria ha realizado esta condena por la abierta injerencia en los asuntos internos de Siria y su política que apoya la matanza e incluye la financiación de grupos insurgentes opositores.
   El Gobierno de Siria ha instado a la comunidad internacional a que se posicione en contra de estas políticas contradictorias con las leyes internacional y las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU relacionadas con la lucha antiterrorista y su financiación, ha añadido la fuente en comentarios recogidos por la agencia oficial de noticias siria, Sana.

La OTAN no va a intervenir militarmente en Siria

PEKÍN.- El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha descartado una intervención militar en Siria para detener la represión del régimen de Bashar al Assad contra las manifestaciones pacíficas.

   En una rueda de prensa, Rasmussen ha recalcado que "Libia y Siria son dos cuestiones muy distintas". 
"Dijimos sí a emprender y responsabilizarnos de la operación en Libia porque, primero, hubo un claro mandato de la ONU para proteger a la población civil contra ataques; y segundo, porque tuvimos un claro apoyo de los países de la región", ha explicado.
   Rasmussen hace así alusión al mandato para la instauración de una zona de exclusión aérea para evitar los bombardeos masivos por parte de las fuerzas de la aviación del Ejército del fallecido líder libio Muamar Gadafi, así como al respaldo que mostró la Liga Árabe en su actuación. Al respecto, el secretario general de la OTAN ha señalado que dicho apoyo no ha sido manifestado por la organización árabe.
   Las condiciones que había en Libia no se dan a día de hoy en Siria, ha continuado Rasmussen, pero tengo que admitir que "me gustaría condenar en los términos más fuertes posibles el comportamiento de las fuerzas de seguridad sirias y sus ataques contra la población civil".
   El régimen de Bashar al Assad "solo tiene una dirección" hacia la que ir, que es respetar los deseos de libertad y democracia de la población siria, ha esgrimido Rasmussen.
   Estas declaraciones han sido realizadas en Dinamarca, donde fue primer ministro entre 2001 y 2009, en el marco de su gira por los países miembro de la OTAN para abordar conflictos como el de Libia y Afganistán y la próxima cumbre que tendrá lugar en Chicago (Estados Unidos) en mayo del próximo año, según ha informado la agencia de noticias china Xinhua.
   Tras reunirse con la recién electa primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt, Rasmussen ha vuelto a abogar por una "defensa inteligente" como solución para las "fuerzas conjuntas en lugar de intentar hallar soluciones puramente nacionales", en respuesta a sus necesidades en materia de Defensa. A colación de estas declaraciones, Thorning-Schimdt ha mostrado su conformidad con dicha estrategia al sostener que es del "interés de Dinamarca" y "un buen ejemplo de cuán sólida es nuestra alianza con la OTAN".