MADRID.- En su primer discurso ante el Comité Federal del PSOE, Pedro
Sánchez ha defendido la necesidad de alcanzar "tres grandes pactos":
sobre educación, sobre política energética y, en principal, para
"mejorar" la Constitución. "Permitamos a las generaciones jóvenes
decidir como quieren su país", ha dicho.
Sánchez, que ha ratificado su intención de presentarse a las
primarias que el partido celebrará el próximo mes de julio para elegir a
su candidato a las generales, se ha mostrado convencido de que
finalmente la modificación de la Carta Magna acabará abriéndose paso,
pese a la actual negativa rotunda del ejecutivo .
"La respuesta del Gobierno a la manifestación de la Diada fue
sencillamente decepcionante, no dijo nada -ha recriminado-; Rajoy sigue
creyendo que dejar correr el tiempo va a solucionar los problemas cuando
en realidad lo que hace es agravarlos y le pido que abra una puerta a
la esperanza, a la convivencia, a la unión de España afrontando un
proceso de reforma y renovación constitucional entre todos".
En un discurso recibido por suyos con moderado entusiasmo, Sánchez ha
argumentado que el PSOE es ahora "más necesario que nunca" porque
España requiere cambios que sólo él puede afrontar. Y ha dado muestras
de lo mucho que le preocupa el auge de la formación que lidera Pablo
Iglesias contra la que ha arremetido con la misma intensidad que contra
el PP.
Sitúa al PP y al Podemos a la misma altura, como dos grandes peligros
para España y como los dos principales rivales del PSOE, pero eso no
quita para que el nuevo líder socialista esté dispuesto a buscar
acuerdos.
"Ahora que se habla de grandes coaliciones me gustaría denunciar la
gran coalición de intereses que se está produciendo entre los extremos,
porque hay un partido que se frota las manos ante el auge del populismo y
es el PP -ha dicho-, sabe que ante el naufragio de su proyecto la única
manera que tiene de perpetuarse es debilitar al PSOE".
"Ha llegado la hora de rebelarse frente a la antipolítica de unos y
otros", ha insistido. Así ha propuesto a los suyos que dejen de hablar
de lo mucho que hizo el PSOE y empiece a hablar de lo que queda por
hacer al partido y a la sociedad en su conjunto. "Lo único que le falta a
España es un proyecto que no va a venir del sálvese quién pueda del
neoliberalismo -ha dicho- ni tampoco de los cuentos vacíos de todos
aquellos a los que no les salen las cuentas".
De ese modo ha criticado por peligrosas varias de las propuestas de
Podemos, como el impago de la parte de la deuda pública que considera
ilegítima ("quien sufriría sus efectos serían nuestros mayores" ha
dicho), la nacionalización de sectores estratégicos ("lo que tienen que
hacer las leyes es prohibir la pobreza energética, fomentar la libre
competencia para que defender a los usuarios") o la rebaja de la edad de
jubilación a los 60 años ("sabemos que ese camino lo que implica es la
quiebra del sistema público de pensiones"). Y ha defendido como gran
medida una reforma fiscal que reparta "mejor" las cargas.
