lunes, 15 de agosto de 2011

Los indignados españoles persisten en sus denuncias sociales


MADRID.- A tres meses de creado, el denominado movimiento social 15-M de indignados en España confirmó hoy que continuarán las denuncias de la situación política, económica y social imperante en el país.

  El movimiento seguirá vivo, en realidad acaba de nacer, afirmó Cristóbal Cervantes, activista de uno de los grupos que conforman la heterogénea congregación social.

Por su parte, Juan Gómez, otros de los denunciantes que acampan desde hace varios días en la plaza Juan Cassinello de la ciudad de Almeria, subrayó que el M-15 consiguió despertar mentes que estaban en el letargo.

La asociación reivindicativa nació el 15 de mayo, cuando miles de personas respondieron al llamado unánime, hecho a través de las redes sociales en Internet, de salir a las calles para exigir un nuevo modelo político, económico y social en España.

De acuerdo con recientes encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas, el 15-M cuenta con el apoyo del 70 por ciento de la población española.

En asamblea general celebrada ayer en la Puerta del Sol, los indignados cuestionaron la reducción del pago del transporte en hasta 80 por ciento de los inscritos para participar en la Jornada Mundial de Juventud en coincidencia con la decisión de subir el billete normal un 50 por ciento.

Constituye una injusticia que a la clase trabajadora y a los desempleados les suban el precio mientras subvencionen el de otras personas por disposición del gobierno de Madrid, dijo una participante en la citada reunión.

El movimiento aseguró en mensajes por las redes sociales que apoyará las huelgas previstas por los sindicatos del Metro, en coincidencia con la llegada del papa Benedicto XVI a esta capital el próximo jueves.

También confirmó su participación en la marcha laica, organizada por unas 140 agrupaciones cívicas, que tendrá lugar en Madrid, un día antes de la visita del Sumo Pontífice, en una crítica por estar financiada con recursos del erario público español, según sus organizadores.

La visita del Papa y la Jornada Mundial de la Juventud, organizada por la Iglesia católica, gastan millones, mientras el 15-M luchando por los principios morales recibe palos de la policía, escriben los activistas en Twitter.

La visita papal causa revuelo entre los "indignados" en España

MADRID.- Los "indignados" madrileños siguen ahí, tres meses después de las movilizaciones masivas de jóvenes desencantados para protestar contra la corrupción, las desigualdades sociales y la falta de oportunidades. Al cobijo de una mínima sombra y provistos de un sencillo taburete y mesa plegable, a veces son un puñado y los domingos, en que realizan asambleas, se congregan varias decenas.

 "La gente no suele venir tanto en verano", argumenta Enrique Viran Salazar, un vigilante de seguridad de 36 años. "Pero aquí seguimos dando continuidad al movimiento e informando a quien quiera saber de nuestros objetivos".
Los jóvenes, que ahora se enfocan en el trabajo barrial más que en las grandes concentraciones, tienen un nuevo blanco para sus dardos: los costos de la visita del papa Benedicto XVI del 18 al 21 de agosto y su posible intromisión en los asuntos de España.
El 15-M, como se denomina al movimiento que surgió con el estallido de grandes protestas el 15 de mayo, no ve con buenos ojos el viaje, "no por la visita en sí, pues (el pontífice) tiene todo el derecho a venir, sino por el alto coste económico para la ciudadanía en estos tiempos de crisis y sus injerencias en la política española", explica, anticipando algún pronunciamiento cuestionable del Santo Padre.
Su compañero David Velasco Fidel, un desocupado de 38 años, va un poco más lejos: "Yo soy homosexual, y me jode que venga el Papa, gracias a mis impuestos, a decirme cómo tengo que vivir mi vida y a recortar mis derechos. Eso es no tener ética personal".
Salazar y Velasco hablaron en la Plaza del Sol, en el centro de Madrid, donde todavía hay alguna presencia de indignados, la cual en estos días pasa casi inadvertida ante las multitudes de jóvenes peregrinos que participan de la Jornada Mundial de la Juventud 2011, la gran mayoría de los cuales jamás oyó hablar del 15-M ni parece demasiado interesada en conocer su razón de ser.
"Ellos van a lo suyo y yo, a lo mío. Deberían llamarlo la Jornada Mundial de la Juventud Católica, pues no representan a muchos jóvenes", dice Velasco.
A Salazar la visita papal le parece "un montaje absurdo y un negocio, porque los patrocinadores privados van a gozar de publicidad gratuita, van a cortar calles, se van a gastar nuestro dinero, e incluso se está hablando de que van cobrar por atender algunas misas".
"La religión y el Estado no deben mezclarse jamás", sostuvo.
Ondeando una bandera mexicana, mientras tanto, los veinteañeros José Israel y Humberto Avalos llegaron el pasado domingo a Madrid provenientes de Monterrey con el objetivo "de visitar los lugares marianos como Lourdes, Toledo o Avila, alentar al Papa en su recorrido, y encontrarnos con Dios y jóvenes de todo el mundo", y dicen desconocer por completo el movimiento del 15-M. 
"En México no nos han llegado noticias", aduce Avalos.
Salazar entiende que "la mayoría de peregrinos son de fuera, jóvenes y, simplemente, vienen a hacer turismo y pasárselo bien en su fiesta, como hacía yo a su edad", aunque reconoce que "algunos sí se han acercado para informarse y les hemos atendido con el debido respeto, como al resto del mundo".
Pero la romana Laura Vialli (28 años), integrante de los más de 2000 Scouts d'Europa que recorren las calles madrileñas estos días, asegura simpatizar con los indignados. "En Italia seguimos el tema de cerca y les apoyamos en sus reivindicaciones. Estamos en contra de las injusticias y la corrupción. Ojalá en nuestro país siguiéramos su ejemplo", dice.
Aún así, no comparte las críticas a la Iglesia por falta de mesura en la visita del Papa. "Creo que es bueno para Madrid y España, porque seguro que dejará beneficios en estos tiempos difíciles", razona, al tiempo que se distancia de los indignados "porque no venimos a hacer política", pese a que el pontífice previsiblemente ofrezca más de un polémico punto de vista en los próximos días: "Debe hacer referencia a lo que no considere justo", justifica.
El desajuste entre los jóvenes españoles y la Iglesia queda también patente en el informe elaborado por la Fundación Santa María, donde se destaca que un 76% cree que la Iglesia es demasiado rica, un 75% que mantiene una postura anticuada sobre la vida sexual, un 64% que se mete demasiado en política y un 63% que se entromete demasiado en la vida personal.
Otro estudio del CIS apunta que sólo un 71% de los españoles se declara católico frente al 87% de 1992, y es entre los jóvenes donde el catolicismo pierde más fuelle, pues apenas la mitad se declaran católicos. Y del escaso 10,3% que se afirman practicantes (eran el 77% en 1967), el 53% están a favor de los matrimonios homosexuales, según datos de Injuve.

La Policía tunecina dispersa con gas lacrimógeno una protesta

TÚNEZ.- Las fuerzas de seguridad tunecinas han utilizado gas lacrimógeno y porras para dispersar a un grupo de varios cientos de personas que se había reunido este lunes frente al Ministerio del Interior para pedir la dimisión del Gobierno.

   La Policía había desplegado gran cantidad de efectivos frente al Ministerio, situado en la céntrica avenida Bourguiba, para responder a esta concentración, según un testigo de Reuters.
   Túnez, pionero dentro de la denominada 'primavera árabe', está ahora liderado por una administración interina que trata de desmarcarse del régimen de Zine al Abidine Ben Alí, que se encuentra en Arabia Saudí. 
Sin embargo, las autoridades provisionales, que deben gestionar el país hasta la celebración de elecciones, son de forma regular objeto de protestas, en parte porque algunos de los sectores que participaron en las marchas contra Ben Alí reprochan ahora al Gobierno interino que no persiga sin fisuras a las autoridades del antiguo régimen y se desmarque de él.

La marcha del 15-M llega hoy a San Sebastián

SAN SEBASTIÁN.- La marcha a Bruselas, integrada por el Movimiento 15-M, que partió el pasado 26 de julio de Madrid, llegará hoy a San Sebastián, donde los indignados de Guipuzcoa les harán un recibimiento para después celebrar todos juntos a mediodía una asamblea en el entorno del frontón de El Antiguo de Donostia, en la que también participarán representantes de las asambleas de Vizcaya, Alava y Navarra.

Según explicaron los responsables de la Acampada Donostia, los integrantes de la marcha permanecerán en la capital guipuzcoana durante todo el día, en el que se celebrará un pícnic popular y diferentes actividades para dar a conocer en qué consiste este movimiento y cuáles son sus demandas.
Ya a las 20.00 horas se celebrará una segunda asamblea, que en este caso está previsto que se celebre en la playa de Ondarreta si el tiempo lo permite, aprovechando que San Sebastián es la única parada prevista en el litoral. 
Los integrantes de la marcha harán un nuevo alto en el camino mañana en Irún y al día siguiente en Bayona para continuar su recorrido hasta Bruselas, que esperan alcanzar el 8 de octubre, cuando habrán sumado 1.500 kilómetros a pie, y donde esperan hacer llegar sus reivindicaciones a las autoridades del Parlamento Europeo.

Indignados y bien organizados en Málaga

MÁLAGA.- Unas 500 personas forman el núcleo duro del 15-M en la capital, cifra que maneja el movimiento. Este núcleo lo componen jóvenes que suelen tener una presencia física en las asambleas. «El número de personas que contribuyen de alguna manera puede estar entre las 2.000 y las 3.000 personas», asegura Javier Fernández, miembro que trabaja en Redes y Difusión, donde el 15-M de Málaga tiene presencia en los principales canales de internet. «Twitter y el correo electrónico son los más potentes», asegura. Todo está perfectamente organizado, a juicio del diario local 'La Opinión'.

El movimiento suma una quincena de comisiones que no dejan cabo suelto. Comunicación y Prensa; Audiovisual: Coordinación General; Coordinación de Barrios y Pueblos; Movimiento Obrero; Educación Económica; Género; Inmigración; Sanidad; Investigación Social; Cooperativismo; Cultura; Acción; Hipotecas, y Universidad son las comisiones que Javier enumera de carrerilla. Según este miembro, cada grupo está formado por entre 10 y 15 personas de media, aunque hay algunos que se disparan y alcanzan las 150, como la comisión de Movimiento Obrero.
El perfil del movimiento en la capital es el de un joven de unos 35 años de media muy igualado en cuanto a sexo. «Es un movimiento muy heterogéneo. Hay parados, universitarios, doctorados, profesionales de todo tipo o personas sin ninguna formación, pero todos están muy comprometidos y preocupados con la situación del país», concluye Javier.

Los indignados siguen siendo puntuales. Las asambleas generales se celebran los miércoles y los domingos a las 20.00 horas en la céntrica plaza de la Constitución. En el caso de los barrios se suelen celebrar los sábados, aunque también depende de las necesidades de cada una. No duran más de cuatro horas. «Por respeto a los vecinos, no pasamos de las doce», aseguran. Las decisiones se toman por consenso total, absoluto.

«Sin un miembro de la asamblea no está de acuerdo con una decisión y se opone, tiene que tomar la palabra para dar razones y alternativas», subraya Javier Fernández. Aunque el indignado no esté de acuerdo con la decisión final, vota a favor por respeto de la mayoría.

Los indignados de Chile / Peter Landelius *

Las manifestaciones callejeras y las tomas de colegios y facultades ya llevan más de dos meses. El otro día, el ex presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle llegó a cuestionar públicamente si el país es gobernable? ¿Qué pasó con el «mateito» de Sudamérica, la envidia de un continente, el ejemplo de buena gestión y de tranquilidad social?

Las exigencias no son nuevas. En el Gobierno anterior, el de Michelle Bachelet, los estudiantes de Secundaria -los «pingüinos»- tomaron calles y colegios en protesta por la mala educación. La presidenta logró calmar los ánimos, pero se limitó a un tímido intento de mejorar la calidad de maestros y profesores a pesar de la feroz resistencia del sindicato. Hay un amplio consenso en el país sobre la urgencia de una reforma educativa, pero no sobre su contenido.

Justo antes de dejar el poder en 1989, Pinochet había hecho una ley de la educación que todavía rige. Municipalizó la parte pública de la educación Primaria y Secundaria, con efectos nefastos tanto para la enseñanza como el equipamiento de las escuelas. Los gobiernos democráticos aumentaron considerablemente los recursos de la educación: hoy, todos los niños chilenos tienen seis años de escolaridad. Pero la urgencia de mejorar la enseñanza tiene el apoyo de todos.

El reclamo de educación gratuita es un tema más divisorio, al igual que el de la prohibición del lucro (existente pero no respetado). El Gobierno de Sebastián Piñera se ve presionado por ambos lados: en su propia base, la mayoría son del partido UDI que nació bajo el ala de la dictadura, y el partido de más influencia en los variopintos manifestantes es el comunista. Aparte de los bandos extremos, los partidos políticos han sido lentos en formular sus opciones. Esta timidez de la clase política es parte de la explicación de que más de cien mil estudiantes estén en la calle.

Otra causa está en errores tácticos del Gobierno. Las manifestaciones han traído problemas de orden público por atraer elementos marginales que aprovechan para robos y destrucción. Hace una semana, al ver que los manifestantes no respetaban los trayectos que se les otorgaba sino que insistían en protestar en la avenida principal, la Policía disolvió la manifestación siguiente con abundante gas lacrimógeno y chorros de agua. Esto llevó a masivas acusaciones de represión excesiva y desató una ola de cacerolazos en gran parte de la capital, protesta que no se había oído desde los tiempos de la dictadura. Unos días más tarde los estudiantes se indignaron al descubrir un policía disfrazado entre sus filas más radicales.

No sólo el Gobierno señala con preocupación el riesgo inminente de que los estudiantes de colegios y de algunas facultades universitarias pierdan el año. Otro riesgo es el de una polarización que Chile no necesita ni quiere. Varios sindicatos ya están sumando huelgas de apoyo. Los que ya deberían haber tomado el tema en sus manos -los miembros del Congreso- siguen posicionándose. Mientras tanto, los estudiantes enardecidos ya exigen que el conflicto se resuelva por una asamblea constituyente y un plebiscito (que la constitución vigente no contempla).

(*) Diplomático sueco residente en Chile

Los ´indignados´ de La Coruña anuncian el levantamiento de la acampada

LA CORUÑA.- Hace poco más de un mes, un grupo de 'indignados' que se presentó como la Coordinadora Provisional de Villas y Barrios remitía un comunicado en el que informaba de que el futuro del Movimiento 15M en la ciudad pasaba por abandonar la acampada del Obelisco y "seguir avanzando hacia los barrios y municipios del área". Hubo un grupo, no obstante, que decidió mantener el campamento. Tras una asamblea celebrada el pasado miércoles, estas personas se han reorganizado y han decidido levantar las tiendas, según el diario local 'La Opinión'.

Los indignados que permanecen acampados desde el pasado mes de mayo en las inmediaciones del Obelisco han decidido levantar mañana las tiendas e iniciar "una nueva etapa" del Movimiento 15M en la ciudad, una vez creados "varios grupos de trabajo".

La decisión la adoptaron el pasado sábado en asamblea y han comunicado a todos los acampados, "entre 15 y 20 personas", que estén mañana a partir de las cuatro de la tarde en el Obelisco para organizar las tareas de desmontaje del campamento. "Una vez allí, sabremos con qué gente disponemos y decidiremos cómo se hará", explicaba ayer una portavoz.

En estos meses, algunos de los indignados que permanecían acampados en el Cantón Grande desde el pasado mes de mayo se fueron por motivos de trabajo y en este tiempo han llegado "otros nuevos". Sospechan que habrá gente que no quiera levantar su tienda, pero insisten en que inician "una nueva etapa".

"Hemos evolucionado y serán los grupos de trabajo los que se encarguen de dar más información sobre el Movimiento 15M y las diferentes propuestas que han surgido", comenta la misma portavoz. El alcalde, Carlos Negreira, les había solicitado en varias ocasiones que abandonasen el Obelisco, pero preguntado sobre una posible orden de desalojo que ya no se realizará, remitía a la Subdelegación del Gobierno.

Los indignados mantendrán un punto de información itinerante, así como la coordinadora de barrios y las reuniones que se convocan todos los lunes, a partir de las siete de la tarde en la plaza de Azcárraga, en la Ciudad Vieja. En la página en internet www.acampadacoruna.com se pueden consultar algunas de sus iniciativas.

Así, en la asamblea popular celebrada el pasado miércoles, crearon grupos de trabajo para hablar del punto de información 15 de octubre, el "supuesto" cierre del hospital militar, la organización de un taller de reinserción ocupacional, las actividades a organizar con motivo de la próxima visita a España del Papa, la situación de los sin techo, la coordinación con los barrios, la creación de un banco de trabajo y la situación de los senegaleses en la ciudad y las "recientes actuaciones de la Policía" con respecto a este colectivo.

También se crearon grupos para coordinarse con el resto de asambleas populares del Movimiento 15M en España, para estudiar posibles acciones de denuncia contra la proliferación de las semillas y alimentos transgénicos -es decir, manipulados genéticamente- preparar iniciativas ante las elecciones generales del 20N y editar un boletín informativo, entre otras actividades.

También han debatido sobre la celebración de ferias taurinas, el gasto que supondrá la organización de la Jornada Mundial de la Juventud, con motivo de la próxima visita del Papa, y el funcionamiento de las "ayudas sociales". A nivel autonómico se ha creado el denominado Grupo Desahucios, para estudiar de qué forma se puede ayudar a gente sobre la que pesa una orden de desahucio por la imposibilidad de hacer frente al pago de un alquiler o una hipoteca.

El pasado 4 de agosto, un grupo de indignados, apoyados por compañeros de Vigo y Santiago, organizaron una acampada en las inmediaciones del pazo de Meirás para denunciar lo que fue "un regalo obligatorio de los ciudadanos" a Francisco Franco, exigir su apertura durante el presente mes de agosto -se ha cerrado al público con motivo del verano de los descendientes del dictador, ya que según la Xunta, habría que montar un dispositivo de seguridad que saldría muy caro- y su "devolución al pueblo".

Los indignados abandonan el Obelisco o como han rebautizado la zona, la plaza 15 de Mayo, pero aseguran que continuarán "informando y denunciando, intentado mover conciencias".

El pasado 3 de julio, la Coordinadora Provisional de Villas y Barrios, que se presentó como la antigua Comisión de Contenidos, remitía un comunicado a los medios para informar de que el futuro del Movimiento 15M pasaba por abandonar la acampada y seguir avanzando hacia los barrios de la ciudad y los municipios del área metropolitana de La Coruña y comarcas cercanas.

Ese día presentó su estrategia de futuro en el barrio, donde sostuvo que la fase de la acampada del Obelisco, "si bien ha sido la cuna del movimiento (en la ciudad), está superada". Advertía entonces de que mantenerla "podría pervertir su esencia" e invitaba a seguir el ejemplo de otras ciudades y a sumarse al trabajo que se desarrolla en los barrios. "Quienes opten por seguir acampados no representan el carácter dinámico del movimiento", argumentaban.

Surgieron así discrepancias entre los que defendían el continuar con la acampada y los que apostaban por su desmantelamiento. Entre los primeros, incluso hubo quien llegó a decir que no existía dicha coordinadora provisional de barrios. Tras la asamblea popular del pasado miércoles y la reorganización y creación de grupos de trabajo entre quienes permanecían en el Obelisco, parece que se han superado esos desencuentros, por otro lado entendibles en un movimiento asambleario como el del 15M.

La visita del Papa a Madrid genera una nueva ola de 'indignados'

MADRID.- La capital española está engalanada para recibir la visita del papa Benedicto XVI este jueves. Cuelgan carteles vistosos de casi todos los faroles, hay pancartas de bienvenida, los colegios y otros centros donde dormirán los peregrinos abren sus decoradas puertas y desde las ventanas de no pocos apartamentos se exhiben avisos simpatizantes con la Jornada Mundial de las Juventudes (JMJ), según relata 'El Tiempo', de Bogotá.
 
La JMJ, que comienza el martes y termina el 21,  vivirá su momento más importante cuando llegue el Papa el jueves. Se cree que esta será la jornada juvenil más concurrida de las veinte que han tenido lugar desde que Juan Pablo II las convocó en 1984. Según la fuente que ofrezca el dato, se estima que llegarán a Madrid entre uno y dos millones de peregrinos (esta es la cifra que aportan los organizadores).
Sin embargo, crece paralelamente un movimiento que muestra su rechazo a la visita papal. Muchos de ellos son, incluso, católicos. 
Los católicos agrupados en Redes Cristianas y el Foro de Curas resumen su posición con una frase: "Así no queremos que vengas". 
Europa Laica, con cientos de iglesias y una cincuentena de organizaciones políticas y sociales, agrega: "De mis impuestos, al Papa cero". Ellos calculan que la visita costará cien millones de euros (muchos de ellos, del bolsillo estatal), aunque los organizadores aseguran que será la mitad.
Para demostrar su indignación, convocaron una manifestación para el 17 de agosto, al comienzo de la JMJ. El itinerario de la protesta se ha convertido en el tema de discusión con el gobierno.
Mientras se zanjan las divergencias sobre las calles por las que se desplazarán, la delegada Dolores Carrión tranquiliza a los peregrinos: "Tengan la seguridad de que no habrá ninguna interferencia de lo poco que queda en Sol [por las bases del 15-M], ni con ninguna otra concentración, derecho de manifestación, acampada o como quieran llamarlo".
Y por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, no ha dudado en denominarla la "manifestación antipapa".
A lo largo de esta semana los organizadores de la protesta han presentado tres rutas posibles y el Ejecutivo las ha prohibido. Cerca de cien asociaciones que participarán rechazaron el itinerario alternativo. Ante la advertencia de la Delegación del gobierno de que cumplirán con la legalidad "con todos los medios", el 17 se verá si la protesta tiene un desarrollo pacífico. La batalla por las calles, pues, parece parte de la guerra. 
Redes Cristianas se opone a la imagen que se difunde del Papa, rodeado de ricos y de lujos, y cree que el dinero que se invierte en su visita se debería dedicar a obras sociales, en un acto que demostraría la cercanía de la Iglesia con los más necesitados.
Aunque el Estado correrá con algunos gastos (aparte de Madrid, otros municipios participan con el hospedaje de peregrinos y con actividades paralelas), la Fundación Madrid Vivo se ha encargado de recoger los fondos que sufragarán la visita.
Se trata de una organización presidida por el cardenal Antonio María Rouco Varela, que cuenta con patronos de lujo, como Emilio Botín (Banco Santander) y César Alierta (presidente de Telefónica). Son medio centenar de donantes, que desgravan el 80% de los aportes.
El director financiero de la JMJ, Fernando Jiménez,  explica que los fondos recaudados provienen de las inscripciones de los peregrinos, los patrocinios de las grandes empresas españolas y las donaciones individuales
Evaristo Villar, de la Asociación de Teólogos Juan XXIII y portavoz de 170 sacerdotes de parroquias pobres de la diócesis, critica el exhibicionismo económico de los organizadores.
Los tres actos principales -misa en la Plaza de la Cibeles, vía crucis y misa de clausura en Cuatro Vientos- cuestan cerca de doce millones y medio de euros, que sufraga la organización.
La instalación de carpas y plataformas necesarias en los espacios, además del centenar de confesionarios que se distribuirán por el Parque del Retiro, suponen unos siete millones de euros.
Cerca de cuatro millones de euros se van en seguridad y acreditaciones, más cinco millones en los maletines de los peregrinos. El programa cultural y la guía para ellos ascienden a cuatro millones y se necesitan cinco más para gastos de oficina.
Hay otros costos que también es necesario contemplar, y que corren por lo general por cuenta del erario público. En cuanto al transporte público, por ejemplo, se emitirá un bono especial del que podrán disfrutar los inscritos en la JMJ, que costará un 80% menos que el regular. Esto significarán veinte millones de euros menos en la caja. Además, se contratarán cien empleados adicionales diarios para el metro, lo que suma 60.000 euros.
Hay algunos rubros difíciles de cuantificar. Los restaurantes con terrazas apostadas en las vías por las que pasará el Papa no podrán servir en las mesas exteriores; casi 700 establecimientos -colegios, centros deportivos, etc.- deberán hacer uso de servicios públicos, como luz y agua; habrá un impacto sobre los negocios de las principales vías que inusualmente se cerrarán al tráfico durante seis días: el centro, con Gran Vía y Recoletos.
Hay quienes se preparan para aprovechar la ocasión con ingenio. Los dueños de viviendas con vista hacia la ruta papal y especialmente hacia la Plaza de la Cibeles -donde el Papa celebrará la misa multitudinaria el jueves-, han alquilado sus balcones a buen precio. Por otra parte, muchos se disponen a salir a la calle para vender sándwiches y bebidas refrescantes a los peregrinos. Y los hoteles de la zona no dan abasto.
El martes arribarán los primeros peregrinos. Ese mismo día se reunirán en una misa en la Plaza de la Cibeles. El jueves llegará el Papa y por la tarde celebrará eucaristía en la esa plaza céntrica.  El viernes asistirá al Monasterio de El Escorial y, por la tarde, tendrá lugar un via crucis.
El sábado 20 se oficiará otra misa, esta vez en la Catedral de la Almudena. Y por la noche será la vigilia en el aeródromo de Cuatro Vientos, una velada a la que asistirán cientos de miles de jóvenes que pernoctarán allí para preparase para el acto central de la Jornada: la misa que celebrará el Papa el jueves.
El acto principal de la visita papal será esa misa, en las afueras de Madrid, a la que acudirán los Reyes españoles y la jerarquía de la Iglesia, en un espacio diseñado por el arquitecto Ignacio Vicens. Habrá una plataforma de 200 metros de largo y 24 de profundidad, y un árbol artificial que proporcionará sombra y generará una llovizna para bajar en tres grados el calor estival.
Ese esplendor, ese derroche de lujo y dinero, es lo que ha enardecido a los grupos que se aglutinan para criticar esta JMJ. Son los nuevos indignados.

Los indignos y los indignados / Roberto Torres Collazo

Como en otras épocas los indignados vuelven a las calles, ahora estan hace meses en Europa, estan protestando, exigiendo, protegiendo sus pensiones, cuentas financieras, sus beneficios laborales, quieren empleos y los que tienen suerte de tener empleo estan luchando por mantenerlos.

Los indignos, los gobiernos y las corporaciones multinacionales, por su parte estan cortando las ayudas sociales, recortando salarios, desalojando la gente de sus casas. Los políticos y sus fuertes aliados los banqueros estan anteponiendo los interes del capital financiero por ensima del capital humano. Los recortes presupuestarios son la orden del día. En consecuencia directa han aumentado las protestas, el desempleo y el empobrecimiento en Grecia, Italia, Portugal, España, Irlanda.

Las demandas de los indignados nos parecen justas. Porque no es justo que los políticos y banqueros tomen decisiones a nombre de sus ciudadanos y no cuenten con ellos en decisiones tan importantes como las económicas y financieras. No es justo que a los pueblos le de pulmonía y a los ricos le de una gripe. No es justo que un trabajador esté casi toda una vida trabajando y ahora vea sus pensiones en peligro de desaparecer.

En Estados Unidos, según Peter Whoriskey en “The Washington Post” (6/16/11): “El 0.1 % de la población fué el que tuvo el más alto salario de la nación; en 1975 obtuvo el 2.6 % en ganancias y en 2008 el 10.4 %”. Este 0.1% de los más ricos aumentaron sus riquezas desde 2000 al 2007 a $670 billones. Los ricos se hacen más ricos y los pobres más pobres: el salario anual promedio de un alto ejecutivo de una corporación es entre $11 y $15 millones al año y hay hasta quien gana la escandalosa cifra de $43 millones. Los salarios y beneficios de los grandes ejecutivos de los mayores 25 bancos y firmas aseguradoras ascendieron en el 2010 a $135.5 mil millones. Cifras del censo indican que el número de personas que vive en la pobreza total aumentó en 2010 a 45 millones. En 2009, uno de cada cuatro Afroamericanos y uno de cada tres latinos vivían con ingresos debajo del nivel de pobreza mientras que solo uno de cada once blancos no latinos eran pobres.

Cuando se hace el saludo o juramento de lealtad a la bandera se dice: “Justicia para todos” el 70% de los estadounidenses no están seguros que haya justicia para todos. Se dice que esta crisis afecta a todos. Falso. Afecta más a unos que a otros. No puede haber democracia política en ningun país mientras no haya democracia económica para todos. No puede haber democracia real mientras los indignos ganan y ganan y los indignados, que son la mayoría, pierden y pierden. Los consensos en Washington parecen estar llevando la nación hacia la decadencia financiera. Hecharle la culpa de todo a un partido político en específico, como hacen algunos, no resuelve ni resolverá nada. Porque Obama prometió un “Cambio” y lo que ha hecho es complacer a las super poderosas corporaciones y a la derecha, que son las que realmente dirigen Estados Unidos y el mundo.

En Estados Unidos necesitamos que los indignados nos tiremos a las calles, nos unamos, organizemos y luchemos pacificamente por lo que es justo, porque no basta votar de cada cuatro años. Que le enviemos un poderoso mensaje al gobierno, Wall Street, las corporaciones y los banqueros de que tenemos dignidad, que no somos marionetas para que jueguen con nuestras familias y nuestro futuro. Tirarnos a las calles para reclamar lo que nos pertenece por derecho. Hoy quizas más que nunca necesitamos la solidaridad internacional entre los indignados del mundo. Es necesario que le digamos que no es justo que mientras que apenas nos llega a los indignados el cheque para fin de mes, los indignos aumenten sus riquezas en nuestras narices.

Cameron dice que reparará una "sociedad rota"

LONDRES.- El primer ministro británico, David Cameron, dijo el lunes que su Gobierno reparará una "sociedad rota" para evitar que se repitan los peores disturbios registrados en el país en décadas. Más de 2.800 personas han sido arrestadas desde que se desataron las protestas, marcadas por disturbios y saqueos en Londres y otras ciudades inglesas.
 
Cameron, quien volvió de unas vacaciones en Italia la semana pasada durante el punto más álgido de los disturbios, está buscando calmar el malestar público con respecto a las protestas, que se dan 15 meses después de que él asumiera el poder.
"Esta ha sido una llamada de atención para nuestro país. Los problemas sociales que han estado causando molestias durante décadas nos han explotado en la cara", dijo Cameron, líder de una coalición conservadora de centroderecha en un discurso el lunes.
"Ahora, así como la gente quería a los criminales enfrentados con firmeza en nuestras calles, ahora quieren ver que estos problemas son asumidos y derrotados. Nuestra lucha por la seguridad debe ir junto a una lucha social", indicó.
Cualquier repetición de los desórdenes de la semana pasada, en la cual se destrozaron y se incendiaron comercios y murieron cinco personas, minará la confianza pública en el Gobierno de Cameron.
Sin embargo, los analistas consultados aseguran que Cameron podría beneficiarse políticamente si da una respuesta firme de ley y orden que algunos votantes están buscando.