MOSCÚ.- La representación rusa ante la Unión Europea ha advertido este miércoles de que no hay "ninguna posibilidad" de que el proyecto de resolución árabe y occidental sobre Siria vaya a ser aprobado en el Consejo de Seguridad de la ONU porque "no descarta claramente la intervención militar", según informó la agencia rusa de noticias Interfax.
El proyecto "ignora lo más importante: una cláusula que deje claro que la resolución no podrá utilizarse para justificar una intervención militar extranjera en los asuntos sirios", declaró el enviado de Rusia ante la Unión Europea, Vladimir Chizhov.
"Por este motivo, no veo ninguna posibilidad de que el proyecto vaya a ser aprobado", añadió Chizhov, citado por Interfax. Rusia tiene derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU en su calidad de miembro permanente.
El embajador de Rusia ante la ONU, Vitali Churkin, había declarado ayer martes que el proyecto incluía "algunos elementos" de la propuesta presentada por Moscú y, por tanto, había alguna posibilidad de "consenso".
El Consejo debate una iniciativa de la Liga Árabe, que secundan tanto Estados Unidos como la Unión Europea, en la que pide al presidente de Siria, Bashar el Assad, que ceda el poder para dar paso a un proceso de transición.
Por su parte, Rusia presentó su propia propuesta semanas atrás, pero fue rechazada por los países occidentales por considerarla poco crítica con el régimen sirio, al que la ONU acusa de la muerte de más de 5.000 personas en el contexto de la represión de las movilizaciones antigubernamentales desde marzo del año pasado.
China, otro país con derecho de veto, ha advertido de que se opone al uso de la fuerza en Siria porque esta opción viola "el propósito y los principios de la Carta de Naciones Unidas".
Veto ruso
El embajador de Rusia ante Naciones Unidas, Vitali Churkin, ha avanzado este miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU que su país vetará cualquier resolución de este órgano que considere "inaceptable", al tiempo que ha dejado claro que no respaldará la imposición de embargo de armas al régimen de Bashar Al Assad.
"Si el texto es inaceptable para nosotros, votaremos en contra, desde luego", ha asegurado Churkin, en una videoconferencia desde Nueva York con periodistas que informan desde Moscú. "Si es un texto que consideramos erróneo, llevará a un empeoramiento de la crisis , no permitiremos que sea aprobado. De eso no hay duda", ha explicado.
El embajador ruso ha dejado claro además que su país no respaldará la imposición de un embargo de armas a Siria y ha recordado que Moscú no puede incumplir los contratos de venta en vigor ni suspender sus relaciones con Damasco. "¿Cómo podemos hacer pedazos todos nuestros contratos y cortar todos nuestros vínculos con Siria?", se ha preguntado el enviado especial del Kremlin.
"No apoyaremos ningún embargo, ni siquiera una amenaza de embargo", ha apostillado. Churkin ha seguido la línea marcada la víspera por el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, que manifestó su rechazo frontal a dejar de vender armamento a Damasco.
"Hemos firmado algunos contratos y los contratos deben cumplirse", afirmó el jefe de la diplomacia rusa, que defendió la venta de armas al régimen de Al Assad, que ha causado más de 5.000 muertes desde el inicio de las manifestaciones antigubernamentales, con el argumento de que es el Gobierno "constitucional".
"Estamos armando al Gobierno constitucional. No aprobamos lo que está haciendo, empleando la fuerza contra los manifestantes, pero no estamos tomando partido, estamos cumpliendo nuestra obligaciones comerciales contractuales", dijo Lavrov.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso incidió en que las armas que Moscú vende al régimen de Al Assad "no están siendo empleadas contra los manifestantes sino para garantizar la defensa de Siria", según la agencia de noticias RIA Novosti.
Una semana antes, el presidente de la compañía estatal de armamento ruso Rostekhnologii, Sergei Chemezov, advirtió de que Rusia está perdiendo su posición de liderazgo como exportador de armas en Oriente Próximo y en el norte de África si no cumple con los contratos en vigor con Damasco.
Veto ruso
El embajador de Rusia ante Naciones Unidas, Vitali Churkin, ha avanzado este miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU que su país vetará cualquier resolución de este órgano que considere "inaceptable", al tiempo que ha dejado claro que no respaldará la imposición de embargo de armas al régimen de Bashar Al Assad.
"Si el texto es inaceptable para nosotros, votaremos en contra, desde luego", ha asegurado Churkin, en una videoconferencia desde Nueva York con periodistas que informan desde Moscú. "Si es un texto que consideramos erróneo, llevará a un empeoramiento de la crisis , no permitiremos que sea aprobado. De eso no hay duda", ha explicado.
El embajador ruso ha dejado claro además que su país no respaldará la imposición de un embargo de armas a Siria y ha recordado que Moscú no puede incumplir los contratos de venta en vigor ni suspender sus relaciones con Damasco. "¿Cómo podemos hacer pedazos todos nuestros contratos y cortar todos nuestros vínculos con Siria?", se ha preguntado el enviado especial del Kremlin.
"No apoyaremos ningún embargo, ni siquiera una amenaza de embargo", ha apostillado. Churkin ha seguido la línea marcada la víspera por el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, que manifestó su rechazo frontal a dejar de vender armamento a Damasco.
"Hemos firmado algunos contratos y los contratos deben cumplirse", afirmó el jefe de la diplomacia rusa, que defendió la venta de armas al régimen de Al Assad, que ha causado más de 5.000 muertes desde el inicio de las manifestaciones antigubernamentales, con el argumento de que es el Gobierno "constitucional".
"Estamos armando al Gobierno constitucional. No aprobamos lo que está haciendo, empleando la fuerza contra los manifestantes, pero no estamos tomando partido, estamos cumpliendo nuestra obligaciones comerciales contractuales", dijo Lavrov.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso incidió en que las armas que Moscú vende al régimen de Al Assad "no están siendo empleadas contra los manifestantes sino para garantizar la defensa de Siria", según la agencia de noticias RIA Novosti.
Una semana antes, el presidente de la compañía estatal de armamento ruso Rostekhnologii, Sergei Chemezov, advirtió de que Rusia está perdiendo su posición de liderazgo como exportador de armas en Oriente Próximo y en el norte de África si no cumple con los contratos en vigor con Damasco.
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