MELILLA.- La Confederación Española de Policía (CEP)
denuncia la falta de seguridad y de medios que padecen los agentes que
prestan su servicio en los puestos fronterizos entre Melilla y
Marruecos, después de que un policía haya resultado herido como
consecuencia de una pedradas.
Según ha informado su portavoz, Juan Carlos Gil Sánchez, el agente
resultó herido el pasado viernes cuando recibió el impacto de la
pedrada durante una concentración de activistas marroquíes en la "tierra
de nadie" de la frontera, zona controlada de facto por las fuerzas de
seguridad magrebíes.
"Un funcionario del Cuerpo Nacional de Policía que se encontraba
realizando labores de control en el Puesto Fronterizo de Beni-Enzar,
encontrándose en el limite de la llamada zona internacional, recibió un
fuerte golpe en la zona lumbar, al ser agredido con una piedra con unas
dimensiones de 25x10x15, quedando aturdido por el intenso dolor", ha
detallado.
El responsable del CEP ha admitido que "a pesar de la gravedad del
hecho, no se pudo identificar al autor de los hechos, debido a la gran
afluencia de personas que se apostan en la citada zona internacional".
Gil ha avanzado que desde el CEP van a realizar la defensa jurídica del
policía, afiliado a su sindicato, y el Gabinete Jurídico se personara en
la causa abierta para velar por sus intereses.
Igualmente, ha comunicado que el Comité Regional de la CEP ha
solicitado que por parte de las autoridades correspondientes se llegue a
un acuerdo con el país vecino, "mediante el que se respete la zona
internacional como espacio de transito y no como esta ocurriendo, que se
encuentra afectada por una gran afluencia de personas que se apostan en
la citada allí, pendientes de poder pasar la frontera al despiste o
entre los vehículos".
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