BARCELONA.- La portavoz de la Plataforma de Afectados por
la Hipoteca (PAH), Ada Colau, y la víctima de una pelota de goma durante
la huelga general del 14 de noviembre, Ester Quintana, han criticado la
"violencia institucional" y han pedido un cambio real del modelo
policial para que la policía catalana luche a favor de las libertades y
los derechos de la ciudadanía, y no para los de los políticos y
banqueros, han alegado.
Lo han explicado Colau y Quintana este jueves en el acto contra la
tortura, los malos tratos y la impunidad organizado en la Universidad
de Barcelona (UB) por la Coordinadora para la Prevención y la Denuncia
de la Tortura y otras entidades, en el que se ha leído un manifiesto y
se han criticado las pelotas de goma, la impunidad de la policía, las
agresiones en las prisiones y los Centros de Internamiento de
Extranjeros (Cie), el maltrato que sufren las víctimas de violencia de
género, los desfavorecidos y los movimientos sociales.
Colau ha declarado que la impunidad de las entidades financieras
destroza y estafa a miles de familias, y ha recordado que cada vez hay
más miembros de la PAH que sufren "represión policial", por lo que la
cooperación entre la ciudadanía y el apoyo social son fundamentales.
La misma cooperación ha pedido Quintana y el portavoz de 'Stop
Bales de Goma', que han recordado el reciente informe del Comité del
Consejo de Europa para la Prevención de la Tortura (CPT) que ha
considerado que el uso de proyectiles antidisturbios deberá ser
exhaustivamente regulado y controlado, por lo que también ha instado a
la sociedad a debatir un cambio de modelo judicial y policial.
"Cuando los manifestantes son simples ratas o el mal absoluto, las
respuestas excepcionales están justificadas y se pueden construir
espacios sin derechos", ha criticado el abogado Jaume Asens, que ha
lamentado que en estos casos se justifique la tortura como si fueran
actos de defensa.
El expreso de Quatre Camins y víctima del motín que hubo en esta
prisión en 2004, Josep Solís, ha explicado su experiencia personal y ha
señalado que un motín no es una cosa organizada, sino el momento en el
que un preso tiene que "defender su vida ante las agresiones continuadas
y sistemáticas" por parte de los funcionarios, y es casi imposible
interponer una denuncia.
Según el integrante del Observatorio del Sistema Penal y Derechos
Humanos de la UB (OSPDH), Iñaki Rivera, y el portavoz de la
Coordinadora, Jorge del Cura, no es fácil denunciar torturas en las
cárceles españolas, pues con facilidad los presos pueden sufrir
chantajes o contradenuncias falsas por daños a la institución.
Los participantes en la mesa redonda han recordado que los abusos
en prisiones son una "práctica habitual", que también ha sido confirmada
por el Comité europeo, que ha considerado que se han producido
prácticas abusivas en las cárceles catalanas, y que los centros se
encuentran sucios y con pocas condiciones higiénicas.
La portavoz de 'Tanquem els CIEs', Cristina Fernández, ha
recordado que la situación en estos centros es "desproporcionada" ya que
se producen reiteradas vulneraciones de derechos humanos, no se informa
del derecho a la tutela judicial efectiva ni del de asilo, se producen
abusos sexuales, los presos viven en malas condiciones higiénicas, de
habitabilidad, en centros saturados y con falta de médicos e
intérpretes.
La Coordinadora ha convocado una manifestación unitaria este
sábado 4 de mayo en la Rambla del Raval y ha recordado que el lunes 9 de
mayo se celebrará el juicio contra nueve funcionarios de prisión
acusados de cometer torturas tras el motín de Quatre Camins en 2004.
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