Veinte muertos durante los últimos incidentes violentos en Siria

DAMASCO.- Al menos 20 personas han muerto, contando once civiles, seis miembros de las fuerzas de seguridad y tres presuntos "terroristas" según el Gobierno sirio, en los últimos incidentes violentos registrados en el país, según informan activistas, residentes locales y fuentes oficiales. 

   Al menos ocho civiles perdieron la vida durante un asalto múltiple realizado por las fuerzas leales al presidente Bashar al Assad en las localidades de Hama --habitual foco de violencia durante las protestas en Siria-- e Idlib, en el noroeste del país.

   Por otro lado, la agencia de noticias oficial SANA informa de seis soldados y tres civiles muertos, y de otras 17 personas heridas cuando el convoy militar en el que viajaban fue asaltado por "una banda armada terrorista" cerca de la ciudad de Mharda, también en Hama.

   Tres de los asaltantes murieron en la persecución posterior, según la agencia.

Liga árabe

El secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, espera viajar en breve a Damasco para expresar la "preocupación" de los países miembros de la organización panárabe por lo que ocurre en Siria, donde la represión causó al menos 16 víctimas más este domingo, según los opositores.
Nabil al Arabi anunció a la prensa este domingo, en la sede de la organización panárabe, en El Cairo, que Damasco aceptaba que él visite Siria, adonde esperaba viajar "esta semana". "Expresaré la preocupación árabe y escucharé", agregó.
El pasado 28 de agosto, Arabi había indicado que esperaba el acuerdo de Siria para viajar a Damasco y presentar una iniciativa árabe para favorecer una salida de la crisis en este país.
En esa fecha, los países miembros de la Liga habían pedido al secretario general "que efectúe una misión urgente en Damasco y transmita la iniciativa árabe para resolver la crisis en la dirección siria", sin desvelar dicha iniciativa.
También instaron a Damasco a "acabar con el derramamiento de sangre y seguir el camino de la razón antes de que sea demasiado tarde", respetando las "aspiraciones legítimas a reformas políticas y sociales" del "pueblo sirio".
Por su parte, El Arabi había asegurado que "el recurso a la fuerza" para reprimir las revueltas en el mundo árabe era "inútil", en una clara alusión a Siria.
La ONU calcula que las manifestaciones y la represión en Siria han causado al menos 2.200 muertos desde el comienzo de las manifestaciones contra el régimen, a mediados de marzo, en su mayoría civiles. Según los militantes opositores, más de 10.000 personas han sido detenidas.
Este domingo, las fuerzas de seguridad sirias mataron a 12 personas en varias ciudades del noroeste y centro del país, indicó Omar Idlibi, portavoz de los Comités Locales de Coordinación (LCC), un movimiento que fomenta la actual protesta contra el régimen del presidente Bashar Al Asad. Entre los fallecidos había una mujer, puntualizó.
Según Idlibi, las fuerzas de seguridad "persiguen al fiscal de Hama (centro), Adnan el Bakkur", quien renunció, tras criticar al régimen.
Por su parte, la agencia oficial siria Sana anunció que seis militares y tres civiles murieron en una emboscada tendida por una "banda armada" en el centro del país.
Por último, en Moscú, el ministro de Relaciones Exteriores ruso Serguei Lavrov, en una rueda de prensa brindada con su par brasileño, Antonio Patriota, estimó que el grupo de cinco países emergentes BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) se opone a que se repita en Siria lo ocurrido en Libia. Según Lavrov, "si todo dependiera de los BRICS, no se repetiría lo ocurrido en Libia", donde una rebelión armada derrocó a Muamar Gadafi con apoyo de la OTAN, que llevó a cabo bombardeos.
"Proponemos que el Consejo de Seguridad de la ONU exija con firmeza a todas las partes involucradas en el conflicto que respeten los Derechos Humanos y empiecen a dialogar", afirmó.