HOMS.- Varios activistas sirios lamentaron el sábado el resultado de la conferencia internacional "Amigos de Siria", y dijeron que el mundo les había abandonado para que las fuerzas leales al presidente Bashar el Asad les maten.
El bombardeo del ejército sirio sobre el distrito Baba Amro de Homs, en poder rebelde, entra en su cuarta semana, mientras la Cruz Roja trataba de evacuar a más civiles angustiados de la ciudad.
"Las negociaciones se han reanudado con las autoridades sirias y la oposición con el objetivo de continuar evacuando a todas las personas que precisen ayuda", dijo Hicham Hassan, portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja en Ginebra.
"Esperamos ser capaces de desarrollar muchas más operaciones para salvar vidas", dijo. "Tenemos la esperanza de que el CICR también entre en Baba Amro hoy".
Pero los activistas en Homs se mostraron desanimados respecto a la reunión "Amigos de Siria" del viernes en Túnez y sospechan de los esfuerzos del CICR porque tienen relación con la Media Luna Roja siria, considerada comprometida por sus vínculos con el Gobierno.
"Nos negamos a trabajar con la Media Luna Roja local", dijo Nadir al-Husseini. "El Gobierno pide utilizar la Media Luna Roja como un truco sucio porque no es un grupo independiente, está bajo el control del régimen. No confiamos en ellos".
El CICR dijo que la Media Luna Roja había evacuado a un total de 27 mujeres y niños de Baba Amro el viernes.
Husseini describió las condiciones desesperantes de Baba Amro, donde los esfuerzos por sacar a tres periodistas extranjeros y los cadáveres de otros dos muertos el miércoles no han tenido éxito aún.
"Sería bueno si ellos (el CICR) pudieran traer algo de ayuda. Pero incluso si nos traen algunos suministros médicos ¿cuánto nos ayudaría? Tenemos cientos de personas heridas apiñadas en casas en todo el vecindario", dijo Husseini.
"La gente muere por falta de sangre porque no tenemos la capacidad de tratar a todos. No creo que ninguna cantidad que nos traigan pueda ayudar realmente".
La conferencia celebrada en Túnez por países árabes, occidentales y otros tenía por objetivo aumentar la presión diplomática sobre Asad para que ponga fin a una represión de casi un mes contra los opositores a sus 11 años de gobierno, en la que han muerto miles de sirios.
La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, advirtió que el líder sirio y sus aliados dentro y fuera del país tendrían que responder por el derramamiento de sangre y la "catástrofe" humanitaria.
En referencia a China y Rusia, que vetaron en dos ocasiones las medidas contra Siria en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, dijo: "Están situándose no sólo en contra del pueblo sirio sino de todo el despertar árabe".
Pero Omar, otro activista de Homs, consideró la reunión un fracaso: "Fue una charla de abogados, no una conversación sobre la guerra. El mensaje es: "Estamos con vosotros sobre el papel, pero nada más", dijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario