MADRID.- El Gobierno justifica la presencia de
policías vestidos de paisano en las manifestaciones cuando los informes y
análisis de riesgos así lo aconsejan y siempre para evitar actitudes
violentas que "desconfiguran" el derecho de reunión.
Ésta es la respuesta que el Ejecutivo de PP ha dado a la batería
de preguntas registradas por el diputado de Compromís-Equo en el
Congreso, Joan Baldoví, sobre los policías "infiltrados" que hubo durante la manifestación del pasado 25-S en los alrededores del Congreso.
En sus interrogantes, Baldoví recordaba la existencia de vídeos y
fotografías en los que se veía a individuos encapuchados que colaboraron
con los antidisturbios para detener a manifestantes, y a otros que se
encontraban en primera fila de esa protesta y sobre los que "hay sospechas" de que eran "infiltrados" de la Policía.
"Que soy compañero", decía uno cuando era golpeado por un agente.
Es más, apunta que en algunos de las cintas se ve que éstos fueron
los que empezaron a provocar a los agentes antidisturbios para
justificar la respuesta policial, a su juicio, "desproporcionada" que
hubo por parte de las Fuerzas de Seguridad contra los manifestantes.
En su respuesta, el Gobierno comienza
recordando la inviolabilidad de las Cortes Generales y subrayando que la Constitución encomienda a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "la misión esencial" de proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizar la seguridad ciudadana.
En concreto, apunta que los efectivos policiales garantizan el
derecho de reunión mediante la adopción de medidas de prevención y de
seguridad que, en su caso, pudieran aconsejar las conclusiones de los
análisis de riesgo de situaciones "especialmente complejas", tal y como el Gobierno dice que era el caso de la convocatoria del 25-S.
"Cuando los informes y análisis de riesgos así lo aconsejan, las
Fuerzas y Cuerpos de Seguridad pueden desplegar efectivos no uniformados
con la finalidad, precisamente, de adoptar medidas de prevención y
seguridad en favor del conjunto de los ciudadanos y de quienes ejercen
su derecho de reunión, evitando, además, actitudes violentas que
desconfiguran la naturaleza de derechos reconocidos
constitucionalmente", reza el texto.
Sobre la misma manifestación también formulaba una serie de
preguntas el diputado de IU por Asturias, Gaspar Llamazares, quien pedía
al Gobierno explicaciones sobre las instrucciones dadas a la Policía
sobre el uso de pelotas de gomas, sobre todo en zonas de riesgo para
los ciudadanos, como lo fueron, a su juicio, la estación de Atocha y sus
andenes.
A este respecto, el Gobierno se limita a explicar que el
lanzamiento de pelotas de goma se rige "por el procedimiento del empleo
progresivo de medios y el respeto de los principios de congruencia,
oportunidad y proporcionalidad, tal y como ocurre en países del entorno en la Unión Europea".
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