BRASILIA.- La Alta Comisionada de la Organización de
Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos, Navi Pillay, ha instado
a las autoridades brasileñas a contenerse en la respuesta que dan las
fuerzas de seguridad a las manifestaciones que se suceden en diferentes
ciudades del país, iniciadas por la subida del precio del transporte
público.
Las protestas han ido creciendo por todo el país hasta llegar a
Río de Janeiro y Brasilia. A las reivindicaciones de bajada del precio
del transporte público, se han unido las críticas por los gastos de la
organización de la Copa Confederaciones, el Mundial de Fútbol de 2014 y
las Olimpiadas de 2016, mientras se reduce el presupuesto a otras
partidas.
Además, el lunes fue la jornada en la que más personas se echaron a
la calle en todo el país, con unas 200.000 personas concentradas en
todo Brasil, según varios medios de comunicación. El Movimento Passe
Livre ha vuelto a convocar para este martes a las 17 horas (22, hora
peninsular española) una nueva protesta en Sao Paulo.
"Con más protestas planificadas, nos preocupa que pueda producirse
de nuevo el uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas de
seguridad", ha indicado Pillay en un comunicado, citando las
"informaciones sobre heridos y detenciones, incluyendo la de periodistas
que cubrían los eventos".
Pillay ha destacado también las palabras de la presidenta
brasileña, Dilma Rousseff, por reconocer la legitimidad de las
manifestaciones. "Pedimos al Gobierno de Brasil que tome todas las
medidas para garantizar el derecho de reunión y evitar el uso
desproporcionado de la fuerza en las protestas", ha solicitado.
La Alta Comisionada de Naciones Unidas ha instado también a las
autoridades brasileñas a investigar las denuncias sobre detenciones
arbitrarias y los posibles abusos cometidos por la Policía
antidisturbios en la represión de las protestas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario