MADRID.- La alcaldesa de Madrid ha pedido a la Justicia
"instrucciones silenciosas" y que "no se prolonguen indefinidamente", a
lo que ha sumado su rechazo a la tendencia de que los jueces se dejen
llevar por "el sentir de la calle", algo propio "de la Revolución
Francesa", ya que lo que hay que hacer es aplicar las leyes emanadas del
Parlamento.
En una entrevista en la Cadena Cope,
Botella ha tildado de "lamentable" y "muy peligroso para el Estado de
Derecho" el fallo de la juez que ha considerado que no es delito el
escrache frente al domicilio de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya
Saénz de Santamaría.
Preguntada sobre si la decisión hubiera sido distinta si el
afectado hubiera pertenecido a otro partido político, la primera edil no
ha dudado en contestar que "la vara de medir siempre ha sido distinta" y
que no quería ni pensar qué hubiera ocurrido si el escrache lo hubiera
sufrido un dirigente socialista. Para Botella, la situación es
especialmente grave ya que lo que está en liza es la inviolabilidad del
domicilio, razón por la que no entiende que el eschache sea considerado
por una juez como "un acto dentro de la normalidad".
La regidora ha lamentado igualmente que la Justicia en España sea
tan "lenta", lo que genera unos "efectos perniciosos". Esto le ha
llevado a pedir "instrucciones silenciosas", que se lleven a cabo "en un
tiempo determinado, que no se prolonguen indefinidamente" y que, cuando
se impute a alguien, que sea "corto" el tiempo que pase hasta que sea
llamado a declarar.
En este sentido, Ana Botella ha defendido que para que los jueces
reciban el respeto de la sociedad española "deben actuar de manera
callada y cumpliendo la ley", además de "no producir prejuicios
irreparables para el honor de las personas", como ocurre en "ciertas
ocasiones".
No hay comentarios:
Publicar un comentario