MADRID.- El líder de Podemos, Pablo Iglesias, y su
círculo de confianza proponen que la formación quede dirigida por un
grupo pequeño de entre diez y quince personas liderado por un secretario
general, elegido mediante elecciones primarias cada tres años por todos
los inscritos en el censo del partido.
Así se recoge en el borrador de principios organizativos que ha elaborado Iglesias junto a algunos de los
miembros del equipo técnico que se encargan de organizar la Asamblea
ciudadana de Podemos, Íñigo Errejón, Juan Carlos Monedero, Carolina
Bescansa y Luis Alegre.
El equipo diseña una organización política con una estructura
parecida a la de las formaciones tradicionales aunque con distinta
denominación de sus órganos, y propone a la Asamblea Ciudadana --de la
que forman parte todas las personas inscritas en Podemos-- como el
máximo órgano de decisión.
La Asamblea Ciudadana deberá ser consultada para todas las
decisiones de relevancia de la organización, como las listas electorales
o la política de alianzas, y tendrá entre sus competencias determinar
la línea de política general de la formación, elaborar las candidaturas y
aprobar los programas electorales definitivos.
También elegirá a 63 miembros de los 81 que formarán el Consejo
Ciudadano, que sería el aparato similar al Comité Federal del PSOE o la
Junta Directiva Nacional del PP. Este órgano será completado por el
secretario general y 17 secretarios autonómicos como miembros natos.
De él saldrá un Consejo de Coordinación de entre 10 y 15 personas
propuestas directamente por el secretario general, que será en el que se
apoye para realizar sus tareas tanto de carácter público como de
coordinación interna.
"Los miembros del Consejo de Coordinación podrán ser revocados por
el secretario general, por la mayoría absoluta del Consejo Ciudadano o
por la Asamblea Ciudadana mediante un referéndum", establece el texto
propuesto por Pablo Iglesias y su equipo. La figura de la revocación
está incluida para todos los cargos del partido, que en cada caso deberá
ser solicitada por diferentes porcentajes de afiliados o miembros de
sus órganos.
Según esta estructura, Podemos también contará con una Comisión de
Garantías Democráticas encargada de velar por el respeto a los derechos
a los inscritos en la formación y sus principios fundamentales y normas
de funcionamiento.
En cuanto a su estructura territorial, replicará básicamente en su
organización interna la fórmula estatal, con su propia asamblea
ciudadana, consejo ciudadano y secretaría general. Sin embargo, las
decisiones de las asambleas territoriales podrán ser revocadas por la
asamblea estatal.
También articula la figura del Círculo, "la herramienta con la que
Podemos promueve la participación, el debate y la relación activa con
la sociedad", y que puede ser de carácter territorial o sectorial. En
los Círculos incluye mecanismos para evitar la pérdida de confianza de
sus miembros, que es uno de los temores de la dirección del partido.
De esta forma, apunta que, en caso de que se haya producido la
pérdida de confianza sobre uno o varios miembros del Círculo, o existan
sospechas "fundadas" sobre su comportamiento, se deberá poner en marcha
un procedimiento "garantista" mediante la recogida de firmas para
iniciar una moción de confianza.
También ha presentado un documento con los principios éticos que
deben guiar a cualquier miembro del partido o representante público, y
que incluye conceptos como la limitación salarial, la rendición de
cuentas o la imposibilidad de pasar a la empresa privada cuya actividad
hubiera tenido conexión de intereses con sus tareas como representante.
Además, sus representantes deben comprometerse a renunciar al
cargo público en caso de ser imputado, procesado o condenado y los
mandatos estarán limitados a un máximo de ocho años, pudiendo
prorrogarse "excepcionalmente" a un máximo de doce.
No hay comentarios:
Publicar un comentario