Para hacer una tortilla hay que romper huevos. Y nuestro
presidente, Mariano Rajoy, no hace tortillas. No se molesta en romper
huevos. En cambio, Artur Mas y sus compañeros separatistas, están
rompiendo huevos un día sí y otro también. Ya dicen abiertamente que
quieren separatismo, independencia... Lo de negociar no sirve de nada,
porque siempre que los nacionalistas huelen debilidad del gobierno de
Madrid, como gustan llamar al gobierno de España, se lanzan a la yugular
aprovechando que la víctima apenas tiene voluntad de defenderse, de
revolverse y atacar.
Artur
Mas lleva mucho tiempo rompiendo huevos. Muchos huevos. Rompiendo
huevos a los españoles que asisten "pasmaos" al espectáculo del norte.
Porque el temor siempre fue a que los etarras llevaran al límite las
reivindicaciones de separatismo vasco. Pero aquello parece que acabó con
Ibarretxe y de donde menos se esperaba, de Cataluña, resulta que nos ha
salido rana.
Ante
la última de los inquilinos del palacio de la Plaza de San Jaime,
desobedeciendo al Tribunal Constitucional y desafiando abiertamente a
las autoridades, con publicidad, nuestro presidente, Mariano Rajoy,
optó, como él ha manifestado, con mesura, con mantequilla. Ya lo vemos, y
lo seguiremos viendo. Seguirá encajando las patadas de Artur Mas
rompiendo huevos en todas nuestras instituciones sin que salten chispas.
Sin que se tomen las medidas correspondientes por irresponsable, por
desobediencia, por desacato a los tribunales.
A
los mortales normales, a los que no somos separatistas catalanes, los
tribunales nos condenan por desacato. Como a un servidor cuando
ejerciendo como periodista, director de un diario de provincias, y le
soltó una fresca al tribunal que pedía explicaciones por lo publicado.
Pero ya sabemos. Hay ciudadanos de tercera, a los que se les condena sin
contemplaciones. Hay ciudadanos de segunda, como La Pantoja, a la que
retrasan a conveniencia su ingreso en la cárcel. Y hay ciudadanos de
primera, como los políticos. Los jueces se lo piensan muy mucho cuando
se topan con un sumario donde hay políticos implicados. Por eso se
comprende que este país sea tan corrupto. Se lo permiten. Como se lo
vienen permitiendo a los separatistas catalanes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario