MADRID.- El apoyo al Partido Popular ha caído drásticamente en
el año que lleva en el Gobierno, en el que ha tenido que aplicar duros
recortes para reducir el elevado déficit público, aunque sigue
aventajando en seis puntos al principal partido de la oposición, el
socialista, según un sondeo publicado el domingo.
El PP del presidente del Gobierno Mariano Rajoy obtiene
un 36,7 por ciento de intención de voto en el sondeo de Sigma Dos para
el diario El Mundo, ocho puntos menos que en las elecciones generales de
noviembre de 2001, cuando ganó por mayoría absoluta ante el descontento
de los votantes con el anterior Ejecutivo socialista.
El PSOE, por su parte, gana dos puntos respecto a
entonces y se sitúa en un 30,7 por ciento de intención de voto, de
acuerdo con el sondeo.
El PP ha emprendido duras políticas de recorte del
gasto en todas las áreas, incluidos ámbitos más sociales como educación o
sanidad, ha subido impuestos y no ha revalorizado las pensiones,
modificando muchas de sus promesas electorales en unas decisiones que
Rajoy ha calificado de "imprescindibles".
El presidente del Gobierno defiende que el objetivo
principal de España es cumplir el objetivo de recorte del déficit
pactado con la Unión Europea, situado en el 6,3 por ciento este año y en
el 4,5 por ciento para 2013, al tiempo que se ha resistido a pedir un
rescate soberano, a pesar de la presión de los mercados durante este
año.
La actuación de los "populares" al frente del Ejecutivo
les supuso una caída en picado de su apoyo durante el primer semestre
del año, que llegó a un mínimo del 35,8 por ciento en el sondeo de Sigma
Dos de junio.
En cambio, en este segundo semestre, en el que ha
entrado en vigor la subida del IVA y los funcionarios se han quedado sin
la extra de Navidad, ha mejorado en casi un punto, al tiempo que se ha
frenado el ascenso de las otras dos formaciones nacionales, Izquierda
Unida y Unión Progreso y Democracia (UPyD).
IU, que alcanzó el 11,8 por ciento en las elecciones de
noviembre, bajaría dos puntos, mientras que UPyD pasaría del 7,8 por
ciento al 7,1 por ciento de intención de voto.
La política de austeridad emprendida por el PP ha
llevado a que la valoración tanto de Rajoy como del Gobierno por parte
de los ciudadanos sea muy negativa. Un 53,3 por ciento tiene una imagen
mala o muy mala del presidente, y hasta un 60,7 por ciento la tiene mala
o muy mala del Ejecutivo.
Cuando llegó al Palacio de La Moncloa hace un año, el
político gallego tenía una imagen buena para el 32 por ciento de los
encuestados, una cifra que ahora ha caído a la mitad.
Ninguno de los 13 ministros consigue el aprobado, y
solo se acerca la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, la cara del
Gobierno en los consejos de ministros de los viernes, con un 4,28.
Tras ella se sitúa el de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, con un 3,8.
En cambio, los peor valorados son los responsables de
dos de las carteras pilares del estado de bienestar: la de Sanidad, Ana
Mato, con un 2,95, el de Educación, José Ignacio Wert, con un 2,96, y la
de Empleo, Fátima Báñez, después de que el paro haya alcanzado durante
este año el 25 por ciento.
No tienen valoraciones mucho mejores los responsables
de otros partidos en un momento de fuerte descontento de los españoles
con la política, y el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez
Rubalcaba, recibe una nota del 3,34.
La mejor valorada es la líder de UPyD, Rosa Díez,
aunque con un 3,72 se queda lejos del aprobado, seguida de Rajoy con un
3,55. El presidente recibía un 5,43 hace un año.
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