REIKIAVIK.- Islandia condena a dos banqueros por el colapso bancario del país, cuando pinchó la colosal burbuja que se había formado por un excesivo crecimiento de su sistema financiero (en 2003, los activos de las entidades suponían un 174% del PIB de Islandia, y ese porcentaje ascendió al 744% en 2007).
Un tribunal de Reikiavik ha condenado a nueve
meses de prisión a los dos máximos responsables del banco Glitnir, el
primero de las tres mayores entidades financieras que quebró y que tuvo
que ser intervenida, y que provocó una profunda crisis en el pequeño
estado del Atlántico norte.
Se trata del ex consejero delegado del banco Larus Welding,
y de uno de sus más estrechos colaboradores en la entidad, Gudmundur
Hjaltason, que fueron acusados de fraude por haber concedido prestamos
con un elevado riesgo y que acabaron provocando la quiebra de la
entidad. Son los primeros banqueros que son condenados por la crisis
financiera.
En septiembre de 2008, los tres mayores bancos
islandeses (Glitnir, Landsbanki y Kaupthing) quebraron consecutivamente
por su voluminosa deuda, y arrastraron al país a su mayor recesión en
seis décadas. Su rescate obligó a que el país pidiera ayuda financiera
al FMI, a cambio de un severo plan de ajuste.
Larus Welding fue arrestado hace un año
por orden del fiscal especial que se encarga de las investigaciones
por las causas de la crisis financiera. El tribunal ha condenado a los
dos directivos bancarios por haber aprobado un préstamos de 102 millones de euros sin las suficientes garantías
a una sociedad tenedora de acciones de Glitnir, para que ésta a su vez
pudiera pagar una deuda con Morgan Stanley. Aquella operación se realizó
vulnerando las propias reglas de la entidad, elevó considerablemente
los riesgos del banco, y acabó provocando unas pérdidas de 53,7 millones
de euros.
Aunque han sido condenados, la pena impuesta a los dos
directivos de Glitnir está muy por debajo de lo que el fiscal especial
había pedido para ellos: cinco años y medio de prisión para Welding, y
cinco años para Hjaltason.
En abril pasado, el ex primer ministro islandés , Geir Haarde, fue declarado inocente por la Justicia de su país tras ser acusado
de no haber hecho lo suficiente para impedir la bancarrota del
sistema financiero. En el juicio, Haarde negó responsabilidades en la quiebra bancaria
sufrida por Islandia en 2008, alegando que no disponía de
información al respecto. La sentencia del Landsdómur (un tribunal
especial) exculpó a Haarde de tres de los cuatro cargos de que estaba
acusado, aunque lo condenó por haber violado la ley sobre la
responsabilidad de los ministros al no convocar reuniones del Consejo
de Ministros para analizar la situación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario