ÁMSTERDAM.- El Gobierno de transición libio ha pedido al Tribunal Penal Internacional (TPI) una prórroga del plazo establecido para decidir si entrega a La Haya a Saif al Islam Gadafi, hijo del depuesto dirigente Muamar Gadafi, según ha confirmado la propia corte.
Trípoli, que hasta ahora siempre ha apostado por que el juicio se desarrolle en Libia, tiene hasta el 31 de enero para determinar si es finalmente el TPI el que juzga por crímenes de guerra a Saif al Islam, detenido el pasado mes de noviembre. El plazo establecido previamente concluía hoy, pero la situación de seguridad en el país norteafricano aparentemente ha complicado los trabajos sobre esta cuestión.
El tribunal ha solicitado información acerca de la situación en que se encuentra el hijo de Gadafi, en particular sobre su salud física y mental y sobre las condiciones de detención. El mes pasado, la ONG Human Rights Watch pidió a las autoridades libias que permitiesen a Saif al Islam el acceso a un abogado con el objetivo de que se cumplan las normas relativas a un proceso justo.
El TPI acusó a Saif al Islam, a su padre y al antiguo jefe de la Inteligencia Abdulá al Senusi por su responsabilidad en la muerte de manifestantes durante las protestas que derrocaron el régimen.
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