MADRID.- Las vinculaciones, fortuitas o no, del PP gallego con principales
jefes del narcotráfico vienen de lejos, aunque hoy la actualidad esté
centrada en el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, por su
amistad en el pasado con el mafioso Marcial Dorado. En 2009, en vísperas
de las elecciones europeas, el presidente del PP, y actual presidente
del Gobierno, Mariano Rajoy, protagonizó un acto electoral en el yate
Moropa, propiedad de un clan de narcotraficantes, según 'El Plural'.
Os Caneos
La familia propietaria de la embarcación eran conocidos como el clan de Os Caneos, que confesaron haber introducido cocaína a España por las costas gallegas.El 19 de mayo de 2009, dos días antes del inicio de la campaña para las elecciones gallegas, Rajoy participó en un acto en Cambados (Pontevedra), que incluyó un paseo por el muelle y la visita a la embarcación Moropa, donde se fotografió con miembros de su comitiva. En su intervención, porque hubo discurso, como es habitual en estos actos, el entonces líder de la oposición exigió -¡qué ironía!- más control en las importaciones pesqueras –“que se controle su legalidad”, dijo- y se comprometió a encabezar una “batalla por la transparencia”.
La familia propietaria de la embarcación eran conocidos como el clan de Os Caneos, que confesaron haber introducido cocaína a España por las costas gallegas.El 19 de mayo de 2009, dos días antes del inicio de la campaña para las elecciones gallegas, Rajoy participó en un acto en Cambados (Pontevedra), que incluyó un paseo por el muelle y la visita a la embarcación Moropa, donde se fotografió con miembros de su comitiva. En su intervención, porque hubo discurso, como es habitual en estos actos, el entonces líder de la oposición exigió -¡qué ironía!- más control en las importaciones pesqueras –“que se controle su legalidad”, dijo- y se comprometió a encabezar una “batalla por la transparencia”.
“No estaba previsto”
Tras darse a conocer la propiedad del yate, el PP gallego alegó que lo de subirse al barco “no estaba previsto ni formaba parte del acto” y que aquella embarcación “era la única que había en aquel momento al principio del muelle y alguien sugirió que sería una buena idea fotografiarse allí”.
En octubre de 2010, la ‘casualidad’ le jugó otra mala pasada a Rajoy,
durante un acto en Tenerife. La foto del líder del PP junto a un
presunto miembro de la Camorra, Domenico di Giorgio, puso al todavía
líder de la oposición en apuros. Fuentes del partido, esta vez de
Tenerife, volvieron a poner por delante el factor azar. “No podemos
pedir un certificado de antecedentes penales de todos los que desean
darle la mano”.
Pero el presunto mafioso no era alguien que pasaba por allí, sino un
simpatizante del PP, que había estado a punto de ir como número cuatro
por el municipio de Adeje en las elecciones locales. Una semana antes
del inicio de esa campaña escribió a la Junta Electoral para retirarse
de la lista, aduciendo motivos personales, sin embargo siguió activo
durante toda la contienda electoral y en su Facebook Di Giorgio exhibió
propaganda del PP hasta el día de la cita electoral. El mafioso fue
detenido por la Policía.